La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) continúa recibiendo las versiones de militares señalados de participar en los asesinatos extrajudiciales, llamados “falsos positivos”. De participar bien fuera disparando, o como actores intelectuales.
El 10 de agosto se presentaron 14 militares condenados por la justicia ordinaria a penas que en algunos casos superan los 40 años. El jueves 13 de septiembre llegó ante el mismo tribunal el general en retiro Mario Montoya, con el fin de suscribir el acta de sometimiento.
Montoya es el más alto oficial del uribismo que se presenta ante la JEP, organismo creado en tiempo posterior a la firma del Acuerdo de Paz, con el objeto de buscar justicia tras aceptar y contar las verdades de delitos cometidos por participantes en el largo y doloroso conflicto colombiano.
Mario Montoya fue escudero de Álvaro Uribe Vélez desde cuando éste último fue gobernador de Antioquia. Defensor acérrimo de la política del dos veces presidente y hoy Senador de la República con un largo historial de investigaciones.
Montoya a su vez tiene entre sus logros la llamada “Operación Jaqué”, que otorgó la libertad a Ingrid Betancurt y 11 secuestrados más. También por la “Operación Fénix”, que generó un lío diplomático con Ecuador a tiempo que acabó con la vida de Raúl Reyes.
Pero a su vez, Montoya está vinculado con masacres como la de San José de Apartadó en 2005, sería gestor de la Operación Orión que se cumplió en Medellín para acabar con supuestos grupos guerrilleros, y la peor de todas, la causa del fin de su carrera militar hace una década, su responsabilidad en los “falsos positivos”.
La audiencia de Montoya fue privada. A la prensa le impidieron el acceso. Pero ¿tendrá resultados su presencia ante la JEP?. Uniminuto Radio consultó con el activista y director de la no gubernamental internacional, Colombia Europa Estados Unidos, Alberto Yépes y esta fue su opinión:
Conocido como el general
Llama nuestra atención la importancia de apoyar a la JEP con seguimiento a sus acciones en la búsqueda de la verdad, como lo afirma Yepes, por cuanto los intereses para mantener la impunidad son muchos. A los medios masivos también les compete responsabilidad en esta insistencia por el bien del país en general, y de las víctimas, las madres y familiares de los jóvenes asesinados.