Programa conducido por el participante del semillero Nicolás Ariza Moreno, con la participación de Gilberto Santos y los docentes Alejandro Contreras y Natalia Montejo. La conversación fue un recorrido sonoro y sensible sobre cómo la música y la palabra pueden tocar emociones que a veces ni nosotros sabemos nombrar.
Gilberto, con su proyecto de musicoterapia activa para adultos mayores con Alzheimer, compartió desde la experiencia vivida, melodías que despiertan recuerdos que parecían perdidos, canciones que conectan con la infancia, con el amor, con el cuerpo. A través de su guitarra, interpretó fragmentos, canciones que fueron llaves para abrir memorias profundas. Insistió en algo esencial: la música viva, hecha en el momento, tiene un impacto distinto, más humano, más directo.
Por su parte, Alejandro, terapeuta sonoro y multiinstrumentista, habló desde la raíz del sonido, desde lo ancestral, lo corporal y lo espiritual. Contó cómo los sonidos naturales, los tambores, las flautas y los cuencos han sido parte de rituales y sanaciones desde hace siglos. Explicó cómo cada vibración tiene una frecuencia que nos toca por dentro, cómo ciertas melodías pueden calmar la ansiedad, traer recuerdos o reconectarnos con quienes somos. También compartió cómo usa la música con jóvenes en procesos de sanación emocional.
La poesía también tuvo su espacio, con la lectura del poema Réquiem de la profesora Natalia Montejo, quien habló del poema como un lugar para habitar el dolor, para nombrarlo, transformarlo y volverlo canto. Recordó que el poema nace del ritmo, de la respiración, y que cuando escribimos o leemos poesía también estamos escuchando, también estamos sanando.
Comentado [NM1]: En este programa yo estaba como invitada para que me integres. Además, poner los docentes antes de los nombres.
Este programa fue, más que una charla, una invitación a detenerse, a escuchar(se). A entender que hay sonidos que curan, palabras que nos cuidan, y recuerdos que pueden volver con solo oír la melodía correcta. Un encuentro lleno de humanidad, de saberes compartidos, y de la certeza de que la cultura también es medicina.
Redactado por Angie Molina, practicante y participante del Semillero en Investigación Él Árbol Rojo.

No olviden seguirnos en nuestras redes sociales, donde encontrarán información del programa y de temporadas anteriores:
Instagram: @literaturaarbolrojo
¡Las y los esperamos en el próximo programa, de El Árbol Rojo!
…de pronto ahí está, delante de ti…” ¡El árbol rojo! “…rebosante de color y vida, tal como lo imaginabas…” Las voces de la escritura, en las hojas de “El árbol rojo”. Un programa del Taller de escrituras creativas “El Árbol Rojo”.