En una tarde serena, El Árbol Rojo volvió a abrir sus ramas para recibir a uno de sus amigos más queridos: Federico Díaz Granados, poeta, periodista y gestor cultural colombiano, quien conversó con Natalia Montejo sobre su más reciente libro Grietas de la luz (Fondo de Cultura Económica, 2024). La entrevista, cálida y hondamente humana, fue un viaje por la memoria, la pérdida y la persistencia del lenguaje como refugio frente al olvido.
Natalia Montejo inició el programa leyendo un fragmento del japonés Yasushi Inoue, evocando a las abuelas que se desvanecen en la niebla del tiempo. No era una casualidad: el libro de Díaz Granados nace precisamente del duelo por sus dos abuelas, ambas afectadas por el Alzheimer. Con voz pausada, el poeta relató cómo la enfermedad, más que arrebatarle recuerdos, le reveló la fragilidad del lenguaje y la necesidad de escribir para reconstruirlo. “Cuando ellas perdieron las palabras —dijo—, sentí que se desmoronaba también mi propio idioma”.
La conversación avanzó entre memorias y anécdotas que mezclaron la intimidad familiar con la reflexión poética. Federico recordó los días de pandemia en que la poesía se convirtió en abrigo colectivo. Contó, con ternura y humor, cómo una amiga lo introdujo al universo de Taylor Swift, y cómo una frase de una de sus canciones —“en las grietas de la luz podemos hacer una pausa”— terminó dándole nombre a su libro. En esas grietas, explicó, habita la posibilidad de la ternura, el instante en que la oscuridad se abre para dejar entrar la esperanza.
Al leer algunos de sus poemas, el poeta nos llevó de la mano por ese territorio entre la vigilia y el sueño, donde las abuelas todavía pronuncian los nombres olvidados. En su voz, el Alzheimer se vuelve una metáfora luminosa de la pérdida, un modo de hablar del amor, del tiempo y de la casa ese símbolo recurrente en su obra que se derrumba cuando desaparecen quienes la habitaron.
La entrevista cerró con la sensación de haber asistido a una conversación entrañable, donde la poesía se mostró como una forma de resistencia y de consuelo. Grietas de la luz no es solo un homenaje a las abuelas del autor: es un testimonio sobre la memoria colectiva, la fragilidad humana y el poder de las palabras para seguir encendiendo la vida aun en medio del olvido.
Redactado por Angie Molina, practicante y participante del Semillero en Investigación Él Árbol Rojo.
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…de pronto ahí está, delante de ti…” ¡El árbol rojo! “…rebosante de color y vida, tal como lo imaginabas…” Las voces de la escritura, en las hojas de “El árbol rojo”. Un programa del Taller de escrituras creativas “El Árbol Rojo”.
