Sin energía no podríamos vivir, ni como seres individuales ni como sociedad. Esa fuerza dinámica que recibimos a través de la luz solar, eólica, de los océanos y las corrientes de agua, se ha buscado imitarla y reemplazarla con la energía nuclear y la del petróleo y sus derivados. El costo real, sus beneficios y el precio a pagar es real con la vida de pueblos llevados a las guerras y el deterioro del medio ambiente.
Una conversación con el ingeniero y docente Hernán Carvajal Osorio, investigador científico colombiano con doctorado en ingeniería nuclear, quien ha dedicado años a temas de movilidad, medio ambiente y energías alternativas.