Halloween, como muchas otras festividades, es una tradición que ha pasado de generación en generación, transformándose con el tiempo pero conservando su esencia. Aunque sus orígenes están ligados a rituales antiguos y celebraciones paganas, hoy sigue siendo una fecha esperada por grandes y pequeños. Lo que nunca cambia es el espíritu festivo: disfrazarse, compartir con amigos y, por supuesto, salir a pedir dulces.
En los últimos años, Halloween ha tenido varias transformaciones. Se han vuelto más comunes las celebraciones temáticas, los eventos comunitarios, las competencias de disfraces y los espacios seguros para que los niños recorran distintas rutas. También las redes sociales han impulsado nuevas tendencias, como los disfraces creativos hechos en casa, maquillajes elaborados y retos virales que reinterpretan la tradición de forma moderna.
Para parchar bien bacano este Halloween, lo ideal es planear con tiempo y tener en cuenta unas cuantas recomendaciones. Elegir un disfraz cómodo y visible, moverse en grupos, cargar linterna o luz LED y revisar bien los dulces antes de comerlos son claves para una noche segura. Y, lo más importante, disfrutar la celebración con respeto y buena energía, manteniendo viva una tradición que sigue evolucionando sin perder su magia.








