“Los viajes, en la juventud, son una parte de la educación, y en la vejez una parte de la experiencia”, esta frase es atribuida al célebre filósofo británico Francis Bacon, pero que al mismo tiempo refleja la motivación de personas que buscan vivir experiencias irrepetibles y desean nutrirse de conocimiento más allá de sus tierras de origen o de su misma cultura, esta es la intención de procesos como la movilidad académica, ya sea a nivel local, nacional o internacional.
La oportunidad de adquirir nuevos conocimientos en otros lugares no es una posibilidad que pocos estudiantes dejen a un lado, pues según el periódico El Tiempo, hasta el año 2019 un 25,8% de la población colombiana ha viajado al exterior con fines académicos y a partir de esta situación, nacen muchas posibilidades de intercambio estudiantil que pueden ser acompañadas de becas o incluso, la realización de prácticas profesionales en nuevos lugares.
Realizar diferentes procesos de movilidad académica trae muchas ventajas para el estudiante que lo aplica, de acuerdo con la Pontificia Universidad Católica de Perú, entre ellos están: el currículo internacional reforzado en temas de experiencia en segundo idioma, crecer como persona rompiendo con los prejuicios culturales y obtener referencias profesionales provenientes de otros lugares diferentes al que se habita.
Sin embargo, los procesos de intercambio estudiantil han afrontado un reto importante durante el último año, debido a que la situación de contingencia presentada a nivel mundial ha restringido los vuelos hacia diferentes lugares y a pesar que el proceso de vacunación ha flexibilizado algunas medidas, este es solo un paso para que la movilidad académica regrese a la normalidad.
Es por dicha situación que las diferentes instituciones educativas y asociaciones universitarias han buscado nuevas oportunidades para realizar estos programas a través de convenios virtuales.
Por ello, en la Voz hablamos sobre “Movilidad académica: un destino posible” con Diana Isabel Rivera Hincapié, comunicadora social y periodista, especialista en Gestión de Proyectos de Cooperación Internacional, magíster en Gestión de Ciencia, Tecnología e Innovación, y directora de Asuntos Internacionales en UNIMINUTO Seccional Antioquia – Chocó, quien explicó algunos mitos sobre la movilidad académica.
No obstante, también compartió algunos programas que permiten la realización de la internacionalización en la virtualidad.
La humanidad vive un periodo de suma conexión y las fronteras que separan a los países parecen desaparecer con la virtualidad, lo cual lleva a las personas a ser más integrales al igual que competentes para su vida. Ahí es cuando la movilidad académica tiene una gran posibilidad de transformar vidas, pues un mundo globalizado es una gran oportunidad de ser más tolerantes y críticos. Aunque los momentos sean pasajeros, los recuerdos y la belleza de un mundo diferentes se quedarán para toda la vida.