Una de las problemáticas más recurrentes para los jóvenes es la búsqueda de un empleo formal que les garantice una buena calidad de vida, esta situación se presenta debido a que el mercado laboral tendría una tendencia a la duda en cuanto a contratar personas que apenas inician un bagaje profesional, pues se cree, que la falta de experiencia podría conllevar a malos resultados.
En la actualidad existen incentivos para las empresas que contraten nuevos talentos como el programa Sacúdete, los cuales pueden subsidiar hasta el 25% del salario mínimo al contratar personas entre los 18 y 28 años. No obstante, esto se ve contrastado con la tasa de desempleo juvenil que de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística se encuentra establecida en un 23,3% en el último trimestre móvil.
Por otra parte, se ha evidenciado que los tiempos actuales traen nuevos retos a futuro para las organizaciones, debido a que la inmersión de la tecnología en la vida de las personas, los cambios sociales y el relevo generacional son cada vez más reales. En este ámbito, las empresas tienen la oportunidad de incorporar ideas frescas para dar cara a estas necesidades y es ahí donde reside la importancia de la contratación juvenil.
Adicionalmente, estas personas traen nuevos aportes que permiten a las empresas mayor competitividad, de acuerdo con la revista Semana, algunas de las características son la iniciativa, proactividad, innovación, uso de las nuevas tecnologías o el dominio de idiomas, esto sumado a la capacidad de ser empáticos con las demás y el ambiente que les rodea.
Sin embargo, las búsquedas de oportunidades laborales para estas personas no pasan únicamente por las puertas que abran las administraciones empresariales o gubernamentales, pues, la adquisición de información de manera autodidacta y el manejo de habilidades blandas resultan valiosas en el momento de presentar una entrevista de trabajo. Según el portal Universia, algunos de los requisitos más solicitados por las empresas son la capacidad de trabajar en equipo, solucionar conflictos y actitud positiva.
Otras posibilidades muy valoradas por parte de los jóvenes son las del emprendimiento y el autoempleo, las cuales nacen de la necesidad de trabajar en cosas que les gusten, tener autonomía y obtener mayores ingresos. Esta práctica contribuye a fomentar valores como la creatividad, asertividad, confianza y pensamiento positivo, sin embargo, la realización de dicha labor puede ser compleja sobre todo en términos económicos.
Por ello, en ‘La Voz de la U’ hablamos sobre ‘Un “sí” a la contratación juvenil’ con Héctor David Carmona Cano, ingeniero industrial, MBA en Dirección y Administración y coordinador de empleabilidad de Centro Progresa en UNIMINUTO seccional Antioquia – Chocó, quien profundizó sobre las habilidades con las que debe contener un joven en la nueva normalidad:
El estado de contingencia nos volvió mucho más globalizados y frente a esto debemos desarrollar nuevas habilidades como trabajar desde diferentes lugares, ser autónomo en el cumplimiento de las funciones, manejo de plataformas al igual que apps colaborativas y la adaptabilidad al cambio, pues la situación actual ha demostrado que los planes que tenemos pueden cambiar en cualquier momento
Héctor David Carmona Cano, coordinador de empleabilidad de Centro Progresa en UNIMINUTO seccional Antioquia – Chocó.
Además, también señaló la importancia de la educación superior en la obtención del empleo e ingresos económicos:
De cierta forma es claro que la educación y la formación no son esenciales para alcanzar un empleo, pero sí son necesarios para obtener un empleo formal y unos mejores ingresos. Entonces, el llamado es a que el objetivo que se plantee en la vida sea emplearse, emprender o ser la marca de su propia empresa, se enfoquen y busquen lo necesario para cumplir lo que se quiere hacer en la vida para tener un futuro tranquilo
Héctor David Carmona Cano, coordinador de empleabilidad de Centro Progresa en UNIMINUTO seccional Antioquia – Chocó.
Los tiempos actuales están enmarcados por el relevo generacional y nuevas personas llegan a aportar ideas frescas que contribuyen al crecimiento de las empresas, pero para eso es necesario romper los mitos que generan temor y abrazar los cambios que trae esta nueva época, pues quienes hoy trabajan con esmero serán los que guíen el camino a los nuevos talentos en el mañana.