Las emociones son reacciones a los diferentes contextos o informaciones que suceden en el entorno, y dicho acontecimiento afectará en diferente nivel la intensidad de la emoción manifestada, que puede ser en cuatro diferentes niveles, mental, corporal, conductual y sentimental, y estas pueden ser positivas o negativas.
A diferencia, el sentimiento es la consecuencia de la emoción, es una respuesta racional y un estado afectivo duradero y con más estabilidad que la emoción.
Existen 5 diferentes emociones, ira, miedo, asco, tristeza y felicidad. Y hoy, en ‘La Voz de la U’, presentamos esta guía práctica y efectiva para realizar una correcta gestión de las emociones.
En primer lugar, se debe aceptar tanto las emociones positivas como las negativas, esto con el fin de que podamos reaccionar de manera efectiva a cualquier tipo de situación, pues, todas y cada una son necesarias.
Como segundo, es necesario ser más consciente de lo que se siente y se piensa, cuestionando constantemente lo que se dice o se hace, se identificarán creencias irracionales que están alejadas de la verdad, nublando la toma de decisiones.
El tercer punto establece la inteligencia emocional, sintonizando nuestras cinco emociones, pero ¿Cómo hacerlo? Inicialmente, identificando los estados emocionales y por supuesto, no limitar estas expresiones, para luego, para luego, escuchar las emociones focalizando así toda la atención donde más es requerida.
Esto, nos llevará a comprenderlas y, por ende, darles un significado, allí, en la reflexión, se encuentra la información y el estado las mismas, para finalmente, poder regularlas.
En el punto cuatro, establece algunas estrategias, como el manejo de la honestidad frente a las emociones manifestadas, ver el lado positivo alrededor, y buscar ayuda cuándo sea requerido.
Cabe mencionar, que los anteriores cuatro pasos pueden ser fortalecidos con algunas actividades de introspección y práctica, por ejemplo, autorreflexión y aceptación, así como la respiración, ejercicios de observación, concentración en pensamientos positivos, suma voluntad y por supuesto, escucha activa.
Es así como en ‘La Voz de la U’ propiciamos una conversación titulada “Gestión de emociones para decisiones sanas” con Yojan Adrían Correa, psicólogo, especialista en Psicología Clínica y Salud Mental, y profesional de Desarrollo Humano de Bienestar – Asuntos Estudiantiles en UNIMINUTO Seccional Antioquia – Chocó, quién explicó a qué se refiere la gestión de las emociones.
Gestionar las emociones es reconocer, tomar conciencia de ellas y las emociones nos expresan inclusive muchas veces realidades que nosotros mismos no queremos reconocer, por ejemplo, en mi consulta cotidiana me encuentro con personas que quisieran ver en su vida que todo marcha perfecto, que todo marcha muy bien, pero hay una tristeza de fondo, la persona se niega a escucharla, se niega a darles el lugar, pero cuando por fin lo hace esa tristeza le señala que su pareja viene cambiando con ella, que le viene mostrando indiferencia y le viene mostrando una realidad que quizá ella no había querido percibir. Entonces mira que cuando la persona toma conciencia de sus emociones, toma conciencia de una realidad que probablemente no quería ver y en ese sentido, las emociones nos permiten captar realidades y adaptarnos a esa situación.
Yojan Adrían Correa, profesional de Bienestar – Asuntos Estudiantiles en UNIMINUTO Seccional Antioquia – Chocó
Además, indicó el impacto de la gestión de las emociones en las relaciones con las demás personas:
Es fundamental porque los seres humanos somos seres emocionales y en la medida en la que yo aprendo a identificar, a gestionar mis emociones, yo voy a estar en una mejor capacidad para hacer eso con la persona con la que estoy interactuando, yo voy a tener mayor capacidad para reconocer la tristeza de mi compañero, de mi familiar, de las personas que habitan mi entorno y con las que me relaciono cuando están alegres, cuando están sensibles, cuando están ansiosos y tener esa esa sensibilidad, desarrollar esa sensibilidad a partir del reconocimiento de mis propias emociones me va a permitir construir una conexión emocional mucho más profunda con estas personas, construir un vínculo mucho más sano con estas personas, además de que me va a permitir de alguna manera tener una interacción donde yo pueda tener esa capacidad de decir “hey, ¿te pasa algo? Hey, cuéntame”
Yojan Adrían Correa, profesional de Bienestar – Asuntos Estudiantiles en UNIMINUTO Seccional Antioquia – Chocó
En conclusión, la gestión de las emociones previene conflictos o enfrentamientos innecesarios, no solo con las demás personas, sino también con uno mismo, facilitando así la expresión y la generación de empatía, orienta hacia los objetivos personales y el proyecto de vida y lo más valioso, fomenta un aprendizaje desde los propios errores.