Por: Danniela Rodríguez
En el calendario del deporte colombiano, junio será sinónimo de competencia, adrenalina y alto nivel con la XXV Olimpiada Especial FIDES Compensar 2025 que se toma la capital con más de 1.800 atletas con discapacidad cognitiva dispuestos a dejarlo todo en la pista, la cancha y la piscina, una verdadera contienda deportiva, con marcas, reglas, cronómetros y objetivos claros.
Esta edición conmemora los 50 años de la Fundación para la Investigación y el Desarrollo de la Educación Especial (FIDES), con su esencia más viva que nunca, el deporte como herramienta de desarrollo, excelencia e inclusión real.
Las Olimpiadas FIDES presentan un escenario de exigencia y preparación comparable con cualquier competencia nacional, los atletas entrenan durante meses en procesos rigurosos, muchos de ellos acompañados por entrenadores profesionales, fisioterapeutas y equipos técnicos.
La inauguración tuvo lugar con el tradicional encendido de la “Llama de la Amistad”, una ceremonia simbólica que recorrió las instalaciones deportivas de Compensar en la Avenida 68 el pasado 18 de mayo, marcando oficialmente el inicio de las competencias.
Las competencias se desarrollarán en escenarios deportivos de alto nivel, como el Estadio de Atletismo, el Velódromo Luis Carlos Galán, el estadio de sóftbol, los centros deportivos de Compensar en la Avenida 68 y otras instalaciones proporcionadas por el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD).
El Distrito ha adecuado estos espacios para garantizar accesibilidad y seguridad, permitiendo que cada atleta compita en condiciones dignas, con estándares técnicos que permitan un desarrollo óptimo de las pruebas.
Durante la semana de competencias se desarrollarán 10 disciplinas oficiales: atletismo, natación, fútbol, bolos, patinaje, deporte ecuestre, ciclismo, gimnasia y baloncesto. A esto se suman cinco modalidades demostrativas, como capoeira, sóftbol, porras, tenis de mesa y juegos de mesa, en todas estas disciplinas, los atletas buscan no solo la medalla, sino superar sus propias marcas, mejorar su técnica, alcanzar un rendimiento más alto e integrar a los deportistas y sus acompañantes.
Estas olimpiadas no son un acto de participación sin rigor, se trata de un sistema de competencia que agrupa a los atletas por niveles de habilidad y desempeño, para garantizar equidad y fomentar el progreso deportivo, acompañados de jueces, reglamentos y clasificaciones precisas, los atletas no buscan ser “incluidos”, sino reconocidos como deportistas, con ese objetivo, entrenan, ajustan rutinas, analizan estrategias y dan lo mejor de sí en cada prueba.
Uno de los pilares más sólidos del evento es el voluntariado, más de 900 personas, entre estudiantes, profesionales y ciudadanos solidarios, se han inscrito para apoyar en las múltiples tareas que requiere una olimpiada de este tamaño, desde asistencia directa a los deportistas, hasta coordinación técnica y actividades recreativas.
La alianza entre Compensar y FIDES no es nueva, pero este año toma un matiz especial al celebrarse el aniversario número 50 de la Fundación, medio siglo promoviendo la participación en el deporte, las dos entidades han construido un modelo replicable de cooperación entre sector privado y organizaciones sociales.
Muchos de los deportistas que compiten son talentos en potencia para otras ligas y programas de desarrollo, algunos han sido invitados a procesos con federaciones paralímpicas y otros han sido embajadores deportivos en sus regiones, convirtiendo a la Olimpiada Especial FIDES en más que un evento de integración, sino demostrando que FIDES funciona como una plataforma de visibilidad para atletas que merecen oportunidades de profesionalización.
