El Adviento es un viaje interior que nos invita a despertar la esperanza. No solo recordamos lo que Dios hizo en el pasado, sino lo que quiere seguir haciendo hoy en nosotros. Jesús viene para renovar, sanar y llenar nuestra vida de sentido.
Este tiempo nos llama a encender la fe en medio de la rutina, a mirar la vida con ojos nuevos y a abrir espacios de oración en los que Dios pueda hablarnos. Su venida es una promesa de compañía, de consuelo y de transformación profunda.
Que esta Navidad nos encuentre unidos, orantes y confiados en el amor de Dios. Que la luz de Cristo ilumine nuestros hogares y renueve nuestras fuerzas. El Señor viene siempre para hacernos nuevos.








