Por: Daniel Rojas Chía
Luego de varios años entreteniendo al mundo entero y con todos sus altibajos, Marvel inicia su etapa 5 este año con el lanzamiento de otro de sus eslabones de su universo. Esta nueva película cuenta con la participación del elenco original con el que se estrenó la primera en 2015, es por eso que Paul Rudd, Evangeline Lilly, Michelle Pfeiffer y Michael Douglas, regresan en una nueva aventura que muestra de nuevo el mundo cuántico.
Esta nueva entrega de superhéroes muestra a Scott Lang y Hope Van Dyne. Ellos regresan para continuar sus aventuras como Ant-Man y Wasp. Con los padres de Hope, Hank Pym y Janet Van Dyne, y con la hija de Scott, Cassie Lang, la familia explora este mundo desconocido donde encuentran extrañas criaturas para construir una aventura en donde todas las reglas son distintas.
La acción inicia casi de inmediato, aunque le exige al espectador haber visto las anteriores dos entregas para tomar el ritmo. Lo importante es que su protagonista Paul Rudd (Scott Lanf) logra entre el humor y la acción un buen impulso, lo que permite que la película por momentos esté equilibrada, dado que los personajes de Hank Pym y Janet Van tomando un protagonismo notable con su presencia y experiencia, opacando por momentos al personaje principal que se esfuerza por ser parte importante de la historia.
La historia no deja de ser otro episodio en las continuidades y las subtramas que en ocasiones les imprimen a las películas serias, que van en paralelo como en este caso, con la serie Loki, que había presentado al villano conquistador de nombre Kang en uno de sus episodios.
Además, es casi imposible no hacer comparaciones con iconos tan importantes como Star Wars en relación con esa generación visual y conceptual de la metrópoli futurista-extraterrestre. Es por ello que Ant-man: Quantumania se entrega a la narración clásica de la ciencia ficción y parece no sorprender, no por su falta de calidad, sino por un problema que agobia a Marcel en los últimos años, su narrativa.
La serie de películas de Ant-man se convirtió en mi favorita del universo de Marvel, porque su historia mezcla lo clásico del género y lo acopla de buena forma con lo actual, sin escapar de la maquinaria que hay detrás de toda la etapa 5. Aunque la cinta es entretenida, parece no lograr momentos épicos que se creía aparecerán con su nivel de producción. Es también algo desafortunado que personajes como Hope (Evangeline Lilly) que tiene tanto potencial para ser contundente y una real protagonista en la historia, no alcanza importancia en la trama, al igual que la endeble actuación de Cassie Lang (Kathryn Newton).
Por otro lado, la presencia de Michael Douglas y Michelle Pfeiffer hacen que la película tenga mayor personalidad y mejor estatus, pues logran que la historia alcance un mayor interés y la expectativa crezca, porque la entretención está sobre la mesa cuántica, además la aparición de una leyenda como Bill Murray, le suma para dejarse asombrar de mundos como solo el cine puede ofrecer.