Por: Rubén Darío Hernández Latorre.
En un consejo de seguridad liderado por la Alcaldesa Claudia López y el secretario de seguridad Hugo Acero, se decidió que, con el fin de descongestionar las Unidades de Reacción Inmediata (URI), se implementará un Centro Transitorio Penitenciario (CTP) en una bodega cercana al sector de San Andresito de la 38.
La localidad de Puente Aranda cuenta ya con varios centros de atención como: la URI de Puente Aranda, la cárcel La Modelo, una cárcel para menores, una Unidad Permanente de Justicia (UPJ) y centros de paso para habitantes de calle, un nuevo complejo de reclusión, según los vecinos del sector, devaluaría sus predios, alejaría el comercio y aumentaría las difíciles condiciones actuales en temas sociales y de seguridad en sus barrios.
Karla Romero, habitante de uno de los conjuntos residenciales cercanos a lo que sería el nuevo centro penitenciario manifestó “Desde que la policía sacó a toda la gente de las ollas del Bronx se ven cada día más habitantes de la calle por toda esta zona, ahora la alcaldesa nos quiere poner otra cárcel cerca a nuestras casas, sin consultar con nosotros, sin preguntar a nadie, ¿Por qué Puente Aranda? Es que no es suficiente la inseguridad que tenemos para ahora tener que recibir más delincuentes”.
La realidad penitenciaria del país es preocupante, según las últimas cifras oficiales, Colombia registra un hacinamiento carcelario cercano al 54.9%, situación que enciende todas las alarmas en los organismos del estado y los obliga a buscar soluciones para las precarias condiciones de los colombianos privados de su libertad.
“Este proyecto no fue socializado, de un día para otro llegaron los funcionarios de la alcaldía y dijeron que en esa bodega se haría esa nueva cárcel y ya, sin discusión alguna, sin tener en cuenta que nosotros pagamos nuestros impuestos y que esperamos que la alcaldía local y la alcaldía mayor trabaje por el bienestar general de toda la comunidad, pero no, nos están trasladando toda la carga judicial de la ciudad” manifestó Karla Romero.
El concejal Andrés Onzaga, ex edil de Puente Aranda, junto a otros 17 concejales de la ciudad, enviaron una carta al secretario de seguridad rechazando la construcción de este nuevo centro en la localidad “hacemos un llamado respetuoso a reconsiderar el desarrollo de la obra e invitarlo a la evaluación de alternativas en las cuales no se afecte a la comunidad Puentearandina” indica uno de los apartes de la comunicación.
Igualmente, el grupo de concejales manifestó “Es de insistirse que la localidad tiene otras necesidades, entre las cuales se encuentran, un nuevo centro de monitoreo, una estación de bomberos, no se cuenta con espacios de participación de ningún tipo; por ende, se hace completamente innecesaria e inconveniente, la construcción de este centro de reclusión generando graves afectaciones a los habitantes…”.
Hugo Acero, por su parte, respondió “Bogotá tiene experiencia con estos casos y no es la única ciudad que está haciendo estas unidades. Nosotros estamos construyendo una URI en Bosa y al comienzo los vecinos se opusieron al proyecto, pero a finales del año pasado (2020) hicimos unos acuerdos que involucran a muchas entidades del Distrito, que precisamente lo que buscan es que haya el menor impacto posible y que se beneficie la localidad con otras acciones”.
Los habitantes de la localidad de Puente Aranda aseguran que mantendrán los plantones y manifestaciones hasta que se logren acuerdos con los organismos distritales, eso sí, mantienen su postura y solicitarán la reubicación de este centro de reclusión.