Escucha nuestras emisoras: 🔊 AUDIO EN VIVO |

Escucha nuestras emisoras: 🔈 BOGOTÁ 1430 AM | 🔈 CUNDINAMARCA 1580 AM | 🔈 TOLIMA 870 AM | 🔈 BELLO | 🔈 SOLO MÚSICA

[Crítica] La hermanastra fea: bella oscuridad con ideas bien construidas

Un cuento de hadas es un relato folclórico europeo de origen popular, que combina elementos fantásticos como magia, encantamientos y criaturas míticas (hadas, duendes, animales parlantes), para narrar aventuras, a menudo con un protagonista heroico y un conflicto entre el bien y el mal, pero La hermanastra fea no tiene nada de fantasía y si mucha violencia.

- Patrocinado -

La directora noruega Emilie Blichfeldt, combina comedia y terror en su interesante ópera prima, con una versión retorcida, áspera del famoso cuento Cenicienta. La película sigue a Elvira (Lea Myren) en su lucha por competir con su increíblemente bella hermanastra Naess (Thea Sofie Loch) en un reino donde la belleza es una moneda de cambio. Elvira hará necesario para captar la atención del príncipe.

Desde que inicia la cinta, gracias a un destacado manejo del director de fotografía, el danés Marcel Zyskind, La hermanastra fea logra una elegancia que le da un mayor impacto a una historia, desde la pintura de artistas como el nacido en Paises Bajos, Abraham van Beyeren o el pintor belga Adriaen van Utrecht. La directora hubiera podido tomar como una sátira, a la que por momentos le da un tono serio, al mejor estilo de Sofia Coppola con su película María Antonieta (2006), incluso adentrándose en el Bodyhorror, subgénero del terror, con el impacto mediático de La sustancia (2024), pero la película que saca su estructura de la Cenicienta, logra una elegancia y una mejor construcción en las atmósferas que por momentos no logra la directora francesa Coralie Fargeat con su sustancia.

Con sus personajes, Blichfeldt parece adentrarse en terrenos conocidos por el espectador, que de primera mano comienza a sembrar bases para una crítica hacia la masculinidad y sus aspectos culturales, sus machismos y su posición de privilegio frente a cualquier figura femenina de manera interesante, que cala no solo en la protagonista, sino que influye en la construcción de un buen guion, con personajes sólidos que no buscan estereotipos con ironía, encontrando un humor sencillo y ligero, que en lugar de eso, refuerza los arquetipos como disparadores de las subtramas, impulsadas por la historia central de Elvira, poniendo en bandeja de plata la atención del espectador hacia las fuertes imágenes que por momentos hacen quitar la mirada de la pantalla.

La dirección de Blichfeldt logra que sus personajes tomen una oscura fuerza que no estaba contemplada, como en el personaje de la madre de Elvira (Ane Dahl Torp) con un desarrollo notable, oscuro y perverso, que les sube el nivel a los mensajes en pantalla, personificando la ambición y contagiando a todos con ella, frente a la constante presencia masculina, que se muestra primitiva, básica y predecible, que, como recurso narrativo, es un acierto. La directora y guionista de la película centra de manera inteligente las acciones en Elvira, con una notable transformación física y de personaje de la actriz noruega Lea Myren, la cual se pone la película en los hombros por momentos, gracias a las buenas secuencias que impulsa y mantiene.

La hermanastra fea es otra buena entrega del terror de este año, que no se queda en los facilismos de la tensión por medio de imágenes fuertes de violencia, como la violencia vacía de Destino final: Lazos de sangre. En lugar de eso, la historia se esfuerza por mensajes potentes como la autocompasión, la lealtad a la esencia de sí mismo, o como la figura de la hermana de Elvira, Alma (Flo Fagerli), que presenta una contundente crítica a los cánones de belleza y un llamado de atención a la individualidad, al sentido crítico, y a la idea de que el príncipe azul existe como figura de falso salvador en una sociedad sin educación y sin cultura.

Una película arriesgada, que no teme a equivocarse y que no acude a excesos como arma y recurso para llamar la atención de su audiencia, que no se queda en la superficialidad de imágenes impactantes, que, con la coproducción de Dinamarca, Noruega y Rumania, cuya directora, Emilie Blichfeldt, deja una prometedora visión del terror, que, con más detalles y elegancia, puede ser mejor que hits mediáticos del cine del mismo subgénero estrenados en 2024. Juzguen ustedes.

| Nota del editor *

Si usted tiene algo para decir sobre esta publicación, escriba un correo a: jorge.perez@uniminuto.edu

Otros contenidos

Contenidos populares