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“Es claro, el apoyo ruso mantiene a flote a Maduro”

La frase proviene de la catedrática Suelen Castiblanco, una analítica de la situación quien considera que Colombia debe continuar con las vías diplomáticas para solucionar la situación del vecino país.

Para Suelen Castiblanco, investigadora y docente de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de la Salle, la falta de concreción del apoyo de la OEA a Juan Guaidó, la ausencia de un impacto de opinión en el concierto de la frontera y el apoyo ruso a Maduro, mantienen la incertidumbre sobre lo que sucede en Venezuela.

A pesar de la escasez de alimentos, la suspensión de servicios públicos, la migración de otro millón de venezolanos, las marchas continuas de la oposición y los bloqueos económicos por parte de los Estados Unidos y Europa, el gobierno de Nicolás Maduro permanece inmóvil.

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Este sábado 27 de abril, miles de chavistas salieron a las calles a brindar un apoyo al presidente y a recibir dos noticias: un nuevo incremento salarial y el anuncio de la salida definitiva de la OEA.

Por su parte Juan Guaidó, autoproclamado presidente en enero y apoyado por unos 50 países, anunció otra marcha para este primero de mayo.

En este año, Colombia ha recibido a miles de venezolanos, se incrementan situaciones de incomodidad por algunas acciones delictivas cometidas por un reducido grupo de inmigrantes y se recibe con expectativa una posible intervención norteamericana en Venezuela.

La catedrática Suelen Castiblanco es una analítica de la situación y considera que Colombia debe continuar con las vías diplomáticas para solucionar la situación del vecino país.

–¿El tema de Juan Guaidó ya se desgastó en Venezuela y en el mundo?

–Considero que hay dos factores decisivos para el desgaste progresivo que ha sufrido Guaidó.  Por un lado, la falta de concreción del apoyo de la OEA a su presidencia; si bien los países han rechazado de forma unánime el gobierno de Maduro y han respaldado a Guaidó, este tipo de acontecimientos muestran lo débil que es la diplomacia latinoamericana y es que más allá de la emisión de comunicados y llamados a la acción, es muy poco lo que pueden hacer.  Por ejemplo, el gran concierto organizado en la frontera no se convirtió en el golpe de opinión esperado, y Estados Unidos aún con la implementación de los bloqueos económicos no ha tenido mayores resultados.  Y el segundo factor, es el apoyo ruso que ha mantenido el régimen a flote contra todos los esfuerzos norteamericanos por hacerlo tambalear. 

–Algunos comentaristas dicen que los apagones en Venezuela son para ahorrar dinero del presupuesto nacional…

— No lo creo, de acuerdo con la información que se conoce, la situación obedece a la incapacidad estatal para hacer las reparaciones y mantenimientos necesarios para el funcionamiento de los generadores.  Es algo muy arriesgado porque, como lo señala The Economist, de todas las amenazas contra el gobierno de Maduro, la falta de provisión de servicios básicos puede ser el golpe definitivo que tumbe su gobierno.

–¿Han servido las medidas económicas en contra de Venezuela? ¿Le reducen su poder de actuar?

–Creo que en la medida en que el respaldo de Rusia siga vigente, es muy difícil que las medidas norteamericanas funcionen.  Solo basta ver los cuantiosos gastos militares que está haciendo el país.  Ahora bien, la hiperinflación se detuvo, lo cual puede ser señal de una recuperación económica, o, un mensaje de que el sistema económico está tan debilitado que ya ni siquiera hay espacio de especulación. Otro tema importante es cuánto del dinero que en este momento circula en la economía venezolana pasa por los canales “visibles”, que son los que puede intervenir, en últimas, el gobierno de Estados Unidos.

–¿Al gobierno de Nicolás Maduro le sirve la diáspora al tener que invertir menos recursos en sus conciudadanos?

Suelen Castiblanco, investigadora y docente de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de la Salle.

–La fuga de cerebros siempre es un mal negocio para los países.  No hay camino a la recuperación económica, sea de este régimen o de otro, si el capital humano de alto nivel migra a otros países.  Por ejemplo, la salida masiva de personal de alta formación en hidrocarburos, es una más de las causantes del descalabro de PDVSA.

–¿Está contribuyendo el Estado colombiano con el gobierno de Nicolás Madura al sostenerle más de un millón de venezolanos?

–No.  Considero un error analizar las ayudas humanitarias como una forma de respaldo al régimen, si esto fuera así, la alternativa sería entonces dejar morir de hambre, enfermedades, etc al millón de personas que en este momento se encuentran refugiadas en el país, eso no tiene sentido.  Al margen del respaldo o rechazo al gobierno de Maduro, es obligación de Colombia acoger a las personas que se encuentre en necesidad, tal como países.

–Se ha comentado también que se estaría repitiendo el caso Mariel –cuando sacaron de Cuba a enfermos y presos peligrosos de las cárceles—y enviar de Venezuela a esos personajes…

–Creo que afirmaciones como esas contribuyen a incrementar la estigmatización contra personas que, en contra de su voluntad, debieron dejar sus hogares y estilos de vida para venir a un país que a la mayoría les es extraño.  Más allá de afirmaciones que hagan más difícil su tránsito, las autoridades colombianas deben aislar a aquellos que están cometiendo delitos, castigarlos, y apoyar a quienes intentan rehacer su vida en el país y aportar a nuestra economía.

–Algunos columnistas y en redes sociales se habla de que los cubanos piden que no haya intervención norteamericana, pero dicen que ellos, si la hacen…

–Creo que la idea de intervención es diferente.  Es claro que hay un doble rasero frente a la intervención militar, por ejemplo, Rusia envía armas a Venezuela y la respalda militarmente a nivel internacional.  Sin embargo, como siempre en política internacional, es fácil olvidar que, por ejemplo, para el caso colombiano Estados Unidos lleva casi 20 años de donaciones directas para acabar el conflicto armado, algo que, si se viera de forma objetiva, es exactamente lo mismo que está haciendo Rusia con Venezuela.  Ahora, cuando hablamos de intervención cubana ¿Nos referimos al envío de cuerpos médicos? ¿A “espías”? Porque no sé qué otro tipo de intervención puede hacer un país que esta semana recomendó a sus habitantes consumir carne de cocodrilo, avestruz y otros animales ante la ausencia de suministros.

Venezuela por fuera de la OEA, según Maduro

–¿Rusia está en Venezuela por sus riquezas o para apoyar un sistema socialista?

–En geopolítica solo hay un propósito real para intervenir, expandir una posición dominante y aumentar la capacidad de negociación, eso exige el acceso a mayores recursos económicos y a mejores ubicaciones geoestratégicas.

–¿Qué podrían hacer los 3 millones de venezolanos que han emigrado al saber que Nicolás Maduro jamás va a renunciar y que, si lo hace, pondrán a otro del mismo sistema?

–Lo que están haciendo en este momento, resistir, manifestarse en contra del régimen y seguir utilizando los canales diplomáticos.  Lo peor que podrían hacer es optar por una vía militar o armada en la que la transición hacia un gobierno democrático sea más criminal que la misma dictadura.

–¿Cuál considera debe ser la postura de Colombia?

–Colombia debe exigir a través de los canales diplomáticos establecidos para la restauración de la democracia, un proceso pacífico de transición de poder y seguir apoyando humanitariamente a los migrantes. 

| Nota del editor *

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