Uribe Turbay, de 39 años, permaneció más de dos meses en estado crítico luego de recibir varios impactos de bala durante un mitin político en el barrio Modelia, localidad de Fontibón. El ataque fue perpetrado por un menor de edad, de entre 14 y 15 años, quien disparó en repetidas ocasiones antes de ser capturado por las autoridades.
A pesar de múltiples intervenciones quirúrgicas y un tratamiento intensivo, la salud del congresista sufrió un deterioro irreversible en los últimos días. El pasado fin de semana presentó una hemorragia intracerebral masiva y un edema persistente, lo que obligó a una nueva cirugía de urgencia y a su sedación profunda. Finalmente, este 11 de agosto, se confirmó su fallecimiento.
La noticia generó una ola de reacciones en el ámbito político y social. Líderes de diferentes partidos, así como ciudadanos en redes sociales, expresaron mensajes de condolencia y homenajes a su trayectoria.
La Fiscalía General de la Nación informó que continúa la investigación para esclarecer los móviles y responsables intelectuales del ataque. Hasta el momento, además del joven sicario, han sido capturados presuntos coordinadores del atentado, entre ellos un hombre identificado con el alias de El Costeño.
Miguel Uribe Turbay, exsecretario de Gobierno de Bogotá y senador desde 2022, era una de las figuras emergentes en la política nacional. Su muerte deja un vacío en el escenario político colombiano y reabre el debate sobre la violencia contra líderes públicos en el país.
Paz en su tumba.