“La diversidad colombiana en el poder. Eso es lo que daría la posibilidad de una era de paz y el mundo puede ayudarnos”, pero entendiendo el contexto del país.
Así, con estas palabras, el presidente Gustavo Petro definió la realidad que vive Colombia y la necesidad de romper privilegios, esquemas raciales y de exclusión para abrirse al mundo como una democracia diversa y consolidar la paz en los territorios.
En su intervención en el foro ‘Transformando vidas, Seguridad Humana y Paz Total en Colombia’, en el auditorio de la Universidad Sueca de Defensa, el jefe de Estado manifestó que “la posibilidad de pasar a una era de paz, como la mayoría de las naciones del mundo, si está a la vuelta de la esquina, pero implica una transformación de Colombia”.
El mandatario presentó, en el evento académico efectuado en el marco de la visita oficial a Suecia, un panorama de cómo debe enfocarse esa transformación, asumiendo el reto de “incluir el territorio excluido con un criterio de prosperidad, que este marcado por la cultura” y “ser como ellos quieren ser, desarrollando su prosperidad”.
Recalcó que Colombia “tiene que abrirse a una democracia, la democracia es plebeya” y en ese sentido, explicó que “ser plebeyo en Colombia significa que los negros puedan estar en el poder” al igual que “los indígenas y los mestizos y los que no descendemos de abolengo español”.
Por lo cual el país debe entender “como una región olvidada se vuelve próspera estando junto al mar teniendo el puerto al lado y teniendo China al frente y el Japón y California por arriba. Eso digamos es obvio que la sociedad capitalista de hoy, sabe cómo se hace”.