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Por Ibeth Salazar y Paola Morales
Año tras año, la cifra sobre el maltrato animal aumenta considerablemente y no se conoce el porqué. Miles de animalistas culpan a la cultura violenta que ha ejercido Colombia en actividades como corralejas, corridas de toros, circos con animales salvajes, etc.
El 15 de junio de 2012, el ex alcalde Gustavo Petro revocó el contrato de arrendamiento a la empresa privada que manejaba las corridas de toros en la Plaza La SantaMaría, acción que ofendió a las personas que consideran que este es un arte, por tanto, no debe ser censurado. Tanta fue la pelea que dieron los amantes de la “fiesta brava” que el 2 de septiembre del 2014 la Corte Suprema de justicia falló a favor de una tutela impuesta con el argumento de “derecho a la libre expresión artística” y exigió a la administración “restitución inmediata” de las corridas de toros en La SantaMaría.
Por otro lado, en las fiestas que se realizan a comienzo de año en varias regiones del país se presentan múltiples ataques a los animales que están involucrados en estas “actividades culturales”. Unas de las más conocidas han sido el descuartizamiento de un caballo vivo, la muerte a golpes de un toro y la muerte de una yegua que fue montada embarazada.
Alberto Fernández Paz, veterinario de la universidad UDCA, comenta cómo esta es la forma más cruel de matar a un animal y del desconocimiento de los procedimientos que le hacen al toro antes de entrar. Él asegura que “le clavan un hierro de 30 cm en la espalda para que salga bravo, y después en la plaza se ríen. Deberían conocerlo en libertad, el toro es un animal súper dócil. Hay toros que son más cariñosos que los perros, y la gente se aprovecha de eso, lo ven como arte”.
Animalistas y personas del común piden al gobierno que impida estas prácticas que apoyan la crueldad hacia los animales y se apoyan en la cultura y el arte. La poca legislación que hay en torno a la tauromaquia es la LEY 916 DE 2004 que tiene como objeto la regulación de la preparación, organización y desarrollo de los espectáculos taurinos en garantía de los derechos e intereses del público y de cuantos intervienen en aquellos. Esta legislación, por supuesto, no han generado cambio en la manera como se concibe al animal en estos espectáculos.
El maltrato animal es una práctica que se debe eliminar desde la casa, según Marcela Malver, Zootecnista de la Universidad de Cundinamarca y especialista en Veterinaria de la Universidad de Santiago de España. Hay tres maneras de contribuir en contra de estas prácticas: denunciar el maltrato que ve uno a diario, evitar la compra de mascotas y, por último, promover más el tema de adopción de mascotas.
Las mascotas también son gravemente azotados por esta violencia. Tener en cuenta qué tipos de acciones son maltrato y cómo se denuncia es parte fundamental para mitigar esto. Actos como abandono, violencia física, golpes, vejaciones, peleas organizadas, etc.), llevar a los animales en transportes inapropiados, mantener animales en estado de mal nutrición y condiciones malas higiénico-sanitarias, son algunas de las formas más habituales del maltrato a animales domésticos.
Denunciar es un acto que se debe convertir en hábito, pues no es tan difícil como se piensa:
Primero es llamar a la policía ambiental (tel: 3159000), a la asociación defensora de animales y el ambiente (ADA) http://www.adacolombia.org/como-actuar/hacer-una-denuncia/denuncias?showall=&start=3,
- Para hacer efectiva la denuncia se debe conocer el lugar donde está sucediendo, fecha y hora exacta en la que se percibió el maltrato, nombre y dirección del denunciado, descripción pormenorizada de los hechos.
- Conseguir testigos que constaten lo ocurrido.
- Por último, tomar fotos y videos con cámara digital donde aparezca la fecha.