Por: Danniela Rodríguez
Esta medida, liderada por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y el Ministerio de Transporte, busca modernizar la infraestructura vial, mejorar la seguridad y adaptar el sistema de señales a contextos urbanos más complejos.
Lo que parece una curiosidad visual, triángulos, rectángulos e inclinaciones en lugar de los clásicos rojo, amarillo, verde, es en realidad una solución pensada para un problema cotidiano, el caos del tráfico en ciudades con sistemas de transporte masivo como Bogotá, Cali y Barranquilla.
La explicación está en la creciente necesidad de segmentar la señalización según el tipo de usuario como peatones, buses articulados, motociclistas y ciclistas. Según la ANSV los nuevos semáforos no reemplazan los tradicionales, sino que complementan la señalización en corredores exclusivos como los del transporte masivo.
La lógica detrás del cambio en escenarios donde los vehículos comparten espacio con buses articulados y peatones, tiene que ver con señales más claras y específicas para prevenir accidentes, reducir confusiones y agilizar la circulación.

Los nuevos dispositivos no eliminan los colores, pero les dan forma. El rojo, ahora se presentará como un rectángulo horizontal en la parte superior del semáforo; el amarillo será un triángulo intermitente ubicado en el centro, que advierte la transición; y el verde tomará la forma de un rectángulo vertical o inclinado para indicar si el vehículo puede avanzar en línea recta o girar.
Las primeras ciudades en recibir los nuevos semáforos serán Bogotá, en el sistema TransMilenio; Cali en el MIO y Barranquilla con el Transmetro, que priorizará los cruces de alta densidad vehicular o con intersecciones complejas.
Se incorporarán semáforos peatonales de piso, franjas LED instaladas sobre el andén que muestran luz verde o roja, que se acompañan de señales sonoras activadas por botón, diseñadas especialmente para personas con discapacidad visual, adultos mayores y usuarios de movilidad reducida.
La nueva señalética está incluida en el Manual de Señalización Vial actualizado en 2024, que incorpora más de 80 nuevos dispositivos, entre ellos estas variantes geométricas, semáforos suspendidos en cables, bases temporales móviles y señalización digital.

En barrios del Suroccidente de Bogotá como Bosa y Kennedy donde ya comenzaron a instalarse los primeros semáforos de prueba, algunos conductores expresan dudas, pero también reconocen el potencial del nuevo sistema.
El cambio en la señalización no será inmediato ni total. La ANSV indicó que se trata de un proceso “progresivo”, que estará acompañado de jornadas de formación ciudadana, capacitación a conductores del transporte público y señalización transitoria.
Los nuevos semáforos se suman a un conjunto de estrategias del gobierno nacional que buscan de la movilidad urbana espacios más seguros, inclusivos y eficientes.
Desde la instalación de sensores de tráfico que adaptan el tiempo semafórico hasta el rediseño de pasos peatonales accesibles, Colombia apuesta por una infraestructura vial que responda a las necesidades del siglo XXI.