La norma tiene sus justificaciones y sus por qué.
La Ley 140 prohíbe también orinar en espacio público. Pero en el Reino Unido un hombre puede miccionar en público, pero debe apuntar a la rueda de su vehículo y mantener la mano derecha apoyada en él. A las mujeres les da más permisos. “Si es una mujer embarazada la que debe hacer pis, podrá hacerlo en cualquier lugar, también dentro de un casco de policía”, dice la norma.
Pero hay leyes que se imponen por una temporada y se quedan de por vida. El 16 de noviembre de 1998 en Colombia nació el 2 por mil para ayudar al sistema financiero, en el 2000 pasó a ser el 3 por mil y en el 2003, el 4 por mil. Se esperaba que fuera por una temporada, pero lo cierto es que ya cumplió 18 años “ayudando” a los 8 banqueros del país.
Pero legislaciones absurdas no sólo ocurren en Colombia sino en muchas partes del mundo.
Por Ley, por ejemplo, los leones no tienen permiso para vagar por las calles de Alderson, en Virginia Occidental.
En Burundi –una pequeña nación soberana ubicada en la región de los grandes lagos de África—es indebido correr. El dictador Pierre Nkurunziza –muy al estilo de Nicolás Maduro– formalizó esta ley en 2014 para evitar que los opositores conspiraran durante las carreras populares o los propios entrenamientos.
En California no se permite matar mariposas.
En Bahréin los ginecólogos sólo pueden examinar los genitales de una mujer a través de un espejo, nunca mirándolos directamente.
En el estado de Kansas por norma no se pueden consumir serpientes, lagartijas, escorpiones y tarántulas y “aunque sea también hacer como que uno se las come”.
En Indonesia la masturbación es ilegal, y su pena es la decapitación.
En Singapur no se permite importar, fabricar y vender chicle desde 1992. Las personas que infrinjan esta ley se enfrentan a penas de hasta dos años de cárcel. Masticarlo también es ilegal, aunque en esta ocasión la condena es monetaria.
Los suizos no pueden tirar de la cadena del baño a partir de las diez de la noche, ya que molestan a los vecinos con los ruidos. De igual manera, los hombres deben orinar sentados a partir de esa hora, pues es considerado contaminación sónica.
En Noruega también hay Ley seca. En época de elecciones no se permite la venta de bebidas con más de un 4,75% de alcohol, ya que este podría enturbiar las votaciones.
Los franceses no pueden nombrar a un cerdo como Napoleón.
En Otawa, Canadá, está prohibido que las abejas zumben.
En Londres no está permitido subirse a un taxi si se tiene gripa y está totalmente prohibido transportar cadáveres o perros con la rabia.
En la estación de tren Warrington Bank Quay, en Gran Bretaña, se prohíben los besos de despedida desde 1910.
Esta sí es bien simpática. Todas las embarcaciones de la Armada Real Británica que lleguen al Puerto de Londres deben regalarles un barril de ron a las personas encargadas de dirigir la Torre de Londres.
Por Ley, nadie puede morirse dentro del Parlamento Británico, ya que este edificio tiene el estatus de Palacio de la Familia Real, por lo que el difunto debería ser enterrado con honores.
Es ilegal en el Reino Unido, además de un acto de traición, poner un sello al revés, siempre y cuando este posea la imagen de algún monarca británico.
Las mujeres que residan en el estado de Vermont, en los Estados Unidos necesitan un consentimiento del esposo cuando necesiten utilizar dentadura postiza.
En Chile, según el Libro III, artículo 495, inciso 8 del Código Penal Chileno, se debe tener un permiso por parte de la alcaldía para hacer cualquier espectáculo público, incluyendo tocar la guitarra o contar chistes en algún parque.
El estado de la Florida las féminas no pueden saltar en paracaídas los domingos.
En Trope, Italia, es ilegal mostrarse desnuda en la playa si es gorda, fea o poco atractiva. Sólo las sílfides tienen la posibilidad de enseñar su cuerpo.
En Kentucky no se pueden llevar armas ocultas de más de dos metros de largo.
Alabama no admite vendar los ojos a una persona mientras conduce su vehículo.
Michigan, y desde 1952, no se consiente arrojar pulpos a las pistas de hielo durante un partido de hockey.
En Los Ángeles es indebido lamer a los sapos, ya que se cree que su piel despega una sustancia que puede provocar síntomas semejantes a los emanados por el alcohol.
En Oklahoma sólo se pueden abrir botellas bajo la supervisión de un ingeniero titulado.
En Cuba, hasta hace unos meses, no se permitía comprar un vehículo, una vivienda, poseer un teléfono celular o un microondas.