La lucha comercial y tecnológica entre los dos dominadores de la economía mundial se enfrentan nuevamente en términos políticos y estratégicos para dominar el planeta.
El presidente Trump, declaró emergencia nacional sobre la tecnología diseñada o producida por “adversarios extranjeros”, ZTE y Huawei de China en un esfuerzo por congelarlos del mercado 5G. Argmentando que “los adversarios extranjeros están creando y explotando cada vez más las vulnerabilidades en la tecnología de la información y las comunicaciones y los servicios” en los que EE. UU.
La orden de emergencia le otorga al Secretario de Comercio la autoridad para bloquear cualquier transacción que pudiera representar “riesgo indebido de sabotaje o subversión” de TI o tecnologías y servicios de comunicaciones, o “riesgo indebido de efectos catastróficos en la seguridad o la resistencia de … infraestructura crítica o la economía digital “.
“Esto no es ni agraciado ni justo”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Geng Shuang, “Instamos a los Estados Unidos a que dejen de citar las preocupaciones de seguridad como una excusa para reprimir injustificadamente a las compañías chinas y proporcionar un entorno justo y equitativo y no discriminatorio para que las compañías chinas operen en los Estados Unidos”.
La Casa Blanca ha expresado una fuerte desaprobación de la tecnología Huawei 5G de China en Europa, que sospecha que espía a la inteligencia estadounidense. También ha criticado la nueva ruta comercial de China destinada a aumentar su presencia comercial en Europa, conocida como la Iniciativa Ruta de la seda. En contra posición el presidente chino Xi Jinping, manifiesta la “apertura” como un esfuerzo por hacer que China parezca un socio comercial más amigable, a medida que aumentan las tensiones sobre las nuevas tarifas con los EE. UU.
La China de hoy no es solo la China de China. Es la China de Asia y la China del mundo. China en el futuro adoptará una postura aún más abierta para abrazar al mundo.