El histórico temporal Elliot ha sumido a Estados Unidos a un clima gélido en plena temporada navideña, amargando la Nochebuena a miles de personas por la cancelación de vuelos, el colapso de carreteras y los cortes de luz en varias partes del país.
Millones de personas se atrincheraron el domingo para capear el temporal invernal que se ha cobrado la vida de al menos 30 personas en Estados Unidos y se espera que se cobre más víctimas, mientras decenas de miles de hogares y empresas quedaron sin electricidad.
La tormenta, una bomba ciclónica causada por un frente de aire ártico, está provocando desde el jueves temperaturas bajo cero desde Canadá hasta Texas, además de intensas nevadas, fuertes vientos y lluvias.
Al menos 200 millones de personas en Estados Unidos, el 60 % de la población, han estado bajo alguna alerta por el clima, según el servicio meteorológico nacional, el National Weather Service (NWS).
La más feroz de las tormentas en décadas, ha provocado cuatro días de vientos polares barriendo el centro y el este del país, un clima extremo, con nevadas y temperaturas de hasta -48ºC, lo que provocó la cancelación de miles de vuelos y volvió intransitables muchas carreteras en la ajetreada temporada de viajes por las fiestas de fin de año.
En Erie, estado de Nueva York, siete personas murieron a causa de la tormenta. Algunos cuerpos fueron hallados en autos y otros en la calle en medio de la nieve, además de algunas muertes ocurrieron en carreteras, muy peligrosas por el suelo congelado y la poca visibilidad.
Algunos medios estadounidenses informaron hasta 30 muertes relacionadas con las tormentas, incluidas cuatro en Colorado y al menos siete en el oeste de Nueva York.
El alcance de la tormenta ha sido sin precedentes, extendiéndose desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el Río Grande, en la frontera con México.
Alrededor del 60% de la población de Estados Unidos se enfrenta a algún tipo de aviso o advertencia meteorológica invernal, y las temperaturas cayeron por debajo de lo normal desde el este de las Montañas Rocosas hasta los Apalaches.
La tormenta invernal provocó que en el habitualmente cálido estado de Florida se dejaran sentir algunas de las temperaturas más bajas desde que existen registros históricos.
Una de las zonas más afectadas es la ciudad de Tampa, en la costa oeste, donde se registró una temperatura mínima de 31 grados fahrenheit (menos de 0 centígrados) en el Aeropuerto Internacional.
Esa mínima sitúa la temperatura de este domingo al nivel de la Navidad de 1966, la cuarta más fría desde que se cuenta con registros, a partir de 1890.
En tanto, es probable que continúen los problemas meteorológicos de los viajeros. Unos 1.707 vuelos nacionales e internacionales fueron cancelados el domingo hasta las 14.00 horas locales.
Los aeropuertos con más afectaciones por cancelaciones y retrasos con los de Detroit (Míchigan), Atlanta (Georgia), Minneapolis (Minnesota) y Seattle (estado de Washington). Además, están cerrados los de Milwaukee (Wisconsin) y de Búfalo (Nueva York).
El temporal también ha golpeado la infraestructura eléctrica del país, donde 1,4 millones de personas permanecen sin luz en sus hogares, principalmente en los estados de Carolina del Norte, Tennessee y Maine, de acuerdo al rastreador Power Outage.
En el sur del país, centenares de migrantes durmieron a la intemperie soportando temperaturas bajo cero en la ciudad de El Paso (Texas), adonde han llegado en los últimos días tras cruzar la frontera con México.