Por: Jonathan Steven Verdugo Manrique, estudiante de Comunicación y Periodismo.
Líderes del sector público y privado presentaron los grandes proyectos de infraestructura que marcarán el rumbo de la ciudad en los próximos años. Con énfasis en el desarrollo del Metro, la movilidad sostenible, el agua y el crecimiento regional, la cita reunió a las voces más influyentes de la capital —desde el alcalde Carlos Fernando Galán hasta los responsables de Movilidad, Transmilenio, el IDU y empresas como Odinsa y Bancolombia— en busca de estrategias para consolidar a Bogotá como un referente de desarrollo urbano en Latinoamérica.
Alcalde Mayor de Bogotá Carlos Fernando Galan en medio de su participación en la “I Cumbre Bogotá Moderna, los megaproyectos que transforman la capital”/ Jonathan Steven Verdugo Manrique. Estudiante de Comunicación – Periodismo UNIMINUTO.

Nuevos rumbos para la movilidad y el crecimiento urbano
Uno de los protagonistas fue el proyecto de la primera línea del Metro de Bogotá, considerado “el más ambicioso de las últimas décadas”. Según las autoridades distritales, la obra ha superado el 64 % de avance desde el inicio de la administración, con un ritmo récord de 2.69 % mensual, y estará operativa en pruebas para mayo de 2026, según lo comunicó el gerente de la empresa Metro de Bogotá Leonidas Narvaez en parte de su conferencia. El alcalde Galán también anunció la adjudicación de la segunda línea, dejando la tercera lista para el próximo gobierno. “Bogotá nunca antes había tenido al mismo tiempo tantos megaproyectos en ejecución”, aseguró, destacando el impacto que el metro tendrá en la movilidad y en la reorganización urbana.
Durante el evento, los representantes de Transmilenio, Férrea Regional y el IDU hablaron de los retos logísticos, económicos y culturales del proyecto, incluyendo las interferencias en el sistema de transporte público y la necesidad de integrar nuevas rutas y estaciones inteligentes. Claudia Díaz, gerente de Movilidad, señaló la importancia de la infraestructura para reorganizar el crecimiento urbano, gestionando el aumento del parque automotor que podría superar los 3,1 millones de vehículos en 2025. Mientras tanto, Leonidas Narváez, gerente de Metro de Bogotá, destacó la expectativa de que más de 70 % de los viajes se realicen en medios sostenibles para 2035.

Agua, ciencia y nuevos ejes de desarrollo
Otro eje central de la cumbre fue la seguridad hídrica. El alcalde Galán recordó que, tras la crisis del racionamiento histórico de 2024, la optimización de la Planta Empresas Públicas de Bogotá en Tibitoc garantiza abastecimiento por 33 años, un logro clave para evitar situaciones de vulnerabilidad. Además, la planta de tratamiento PTAR Canoas, con una inversión de 6 billones de pesos, permitirá tratar el 70 % de las aguas residuales de Bogotá y el 100 % de las de Soacha, mejorando la calidad del agua dulce y avanzando en la recuperación Ambiental- “El 70% del agua residual de Bogotá no se trata hoy en día, nosotros nos dimos a la tarea de destrabar el Proyecto que va a permitir cubrir el 70% adicional” mencionó el mandatario de la capital.
Hacia una ciudad del siglo XXI
La I Cumbre Bogotá Moderna cerró con una visión clara: transformar la capital en una metrópoli capaz de enfrentar desafíos de movilidad, sostenibilidad y desarrollo urbano. El alcalde Galán reafirmó que la ciudad está en un punto de inflexión histórico, con obras que redefinirán su identidad y mejorarán la calidad de vida. “Estamos dejando atrás las obras eternas y construyendo el futuro de Bogotá”, concluyó el mandatario. La cumbre no solo fue un balance de avances, sino también una hoja de ruta para la Bogotá del siglo XXI, decidida a crecer sin perder su esencia, y como mensaje importante deja claro que Bogotá es una ciudad en construccion active, por lo cual la movilidad en estos momentos presenta retos y mejoras en esta transición.








