Por: Melissa Diaz-Quevedo. 9no semestre.
A lo largo de los años, una de las principales actividades económicas de las plazas de mercado era la venta de animales. La del Restrepo llevaba alrededor de cincuenta años con esta modalidad y hacía más de 10 años que intentaban acabar con las prácticas. No fue hasta el 28 de marzo del año 2020 que se pudo clausurar por una medida sanitaria de 2017 que prohíbe la estancia de animales cerca de establecimientos que vendan alimentos.
Fue la actual senadora animalista Andrea Padilla, en ese entonces concejal de Bogotá (2020-2021), quien gestionó el operativo de desalojo. Hoy le relata a Datéate que ha dedicado más de la mitad de su vida a luchar por la dignidad de los animales en la ciudad y en el país. “Tuve que tomar una decisión frente a cómo ejercer mi profesión (psicología con énfasis en psicología jurídica) y en qué enfocar todos mis esfuerzos. Fue entonces cuando decidí enfocarme en el tema de los animales. Me hice socia de la Asociación defensora de Animales y fui vocera durante más de 10 años de AnimaNaturalis, una ONG Iberoamericana. Así empecé a dedicar mucho tiempo de mi vida y de mis recursos económicos, hasta que llegó el momento de tomar la decisión de lanzarme a la política electoral y aquí estoy”
Cuenta que su primera gata, Mayo, fue quien la confrontó con muchas cosas y la impulsó a seguir con la causa de los animales a los veintitrés años. Desde entonces empezó a interesarse por esos temas y ha sido hogar de paso por más de diez años, en especial para gatas lactantes, embarazadas o con necesidad de tratamientos especiales. También dice que su lucha en la política nacional es un reto “Para mí es una responsabilidad enorme. Por supuesto hay alegría y mucha gratitud por la confianza que la gente ha depositado en mí, pues sin votos no llego. Pero, sobre todo es un desafío recoger los reclamos de nuevas generaciones y comunidades para hacer leyes y normas de cambios profundos”.
Valentina Ortiz es una de las votantes que ha hecho veeduría al trabajo de Andrea Padilla tanto de concejala como de senadora. Le explicó a Datéate que una de las razones que la motivó a votar por Andrea fue que no conocía a nadie más en la política que estuviera defendiendo los temas de animales. “Creo que es una persona muy seria desde su trabajo activista y también académico. Me gusta como ella se expresa. Se nota que está explicando y no vendiendo. Incluso una vez la vi tomamos el mismo bus y ella iba sola con sus carteles ya estando en campaña. Todo ese tipo de cercanía con la gente me generó, de alguna manera, confianza.”
Dentro de sus metas como activista estaba el luchar por cerrar el comercio de especies en las plazas de mercado. “La venta de los animales en el Restrepo era uno de los temas que me atormentaba el alma. Fui dos veces nada más porque salía con el corazón destrozado y esas dos veces les prometí que los iba a librar de ese calvario como fuera”. Además, afirmó que lograrlo por las vías democráticas fue un paso gigantesco. Hoy en día sigue luchando contra este tipo de actividades y ha acompañado operativos en lugares como la zona de venta de mascotas en Bogotá, entre las calles 50 y 53 con Avenida Caracas, donde todavía se pueden vender animales y donde se encuentran especies en condiciones precarias.
La senadora explica que el camino no ha sido fácil porque siguen existiendo actitudes despectivas, incrédulas o de burla frente a los animales y su reconocimiento como habitantes de la ciudad y el mundo. Pero afirma que las agendas están cambiando y que partes de la sociedad, como la juventud, están priorizando temas que antes no tenían la importancia o visibilidad mediática y eso ayuda a avanzar.
Este año, su gestión como Senadora fue un apoyo importante para que los animales fueran incluidos en el Plan Nacional de Desarrollo con un proyecto hecho en conjunto con el Departamento Nacional de Planeación, el Ministerio de Ambiente y ciudadanos y activistas de diferentes regiones del país. Y en este momento se encuentra liderando proyectos como la “Reforma a la Ley 1774 de 2016” contra la crueldad y entretenimiento con animales y el Proyecto de Ley 085 que busca prohibir progresivamente las corridas de toros en el país.
Para terminar la conversación, Andrea relata cómo se ve en un futuro próximo. Sabe que seguirá luchando por temas de dignidad y justicia con los animales y le gustaría retirarse del sector público dentro de 20 años. Termina diciendo que su pelea en el Gobierno Nacional continuará hasta donde más pueda y que más adelante le encantaría tener un santuario “quisiera construir un lugar hermosísimo donde pudiera llevar niños a educar, donde pudiera ayudar un poquito a cambiar esas nuevas generaciones desde chiquitos y desde lo más profundo de su corazón”.