La cadena internacional de café decidió cerrar sus 8.000 establecimientos en los Estados Unidos durante esta semana, luego del arresto de dos hombres afroamericanos que se encontraban en una de sus tiendas en Filadelfia.

El hecho generó comentarios de discriminación racial en redes sociales hacia la reconocida marca, lo que ocasionó que las instalaciones americanas cerrarán las puertas al público por casi 4 horas para que sus más de 175.000 empleados asistieran a un curso sobre igualdad racial.

Con videos y foros de discusión la compañía se reunió con sus empleados para resaltar que el objetivo de Starbucks es hacer sentir a la gente cómoda y bien recibida, la compañía también anunció públicamente que la política se impone para que clientes y no clientes puedan hacer uso del baño y de las instalaciones del lugar de manera indefinida.

El incidente recopila dos versiones, la primera del encargado de Starbucks quien afirmaba que los hombres no se encontraban consumiendo ningún producto dentro de la tienda y la segunda de los hombres que afirmaron, se encontraban a la espera de un amigo para realizar el pedido.

Por: Alejandra Cubillos Bermúdez