Los primeros zapatos de tacón
Los orígenes sobre los primeros tacones son variados, por ejemplo hay pinturas rupestres de hace 15.000 años en las que hombres y mujeres aparecen utilizando tacones, tanto en el antiguo Egipto como en la comunidad de los hititas de Asia Menor, quienes añadieron tachuelas de hierro a las suelas de cuero de las botas para hombre, de modo que se facilitara el agarre.

Pero también se dice que el origen de los zapatos de tacón data del siglo XV cuando se crearon las “botas cowboy”, las cuales fueron diseñadas para los jinetes que hacían maniobras a caballo y necesitaban encajar el pie perfectamente en el estribo.
Posteriormente, los zapatos de tacón fueron diseñados para la nobleza masculina de modo que diferenciara el estatus social de ellos, entre más alto el tacón más poder poseían sobre los demás, pero fue hasta la boda de Enrique II de Francia y Catalina de Médici en la que la novia también lució por primera vez unos tacones y desde entonces, el diseño se popularizó para ambos géneros.

En la década de 1670 Luis XIV firmó un edicto en el que solo los miembros de su corte podían calzar zapatos con tacones rojos, sin embargo la alta sociedad continuaba utilizándolos. En la década de 1630, las mujeres vestían diseños muy masculinos para asegurar una posición de igualdad en la época, por lo que a finales del siglo XVII, los hombres comenzaron a usar tacones más robustos, bajos y cuadrados, mientras que los de las mujeres eran más esbeltos y curvos.
¿Qué tipos de tacones hay?
Zapatos con tacón Stiletto: miden más de 9 cm de altura y su tacón es muy fino.

Zapatos de tacón alto: miden más de 7 cm de altura y ayudan a estilizar la figura.

Zapatos de tacón medio: miden menos de 7 cm y son comunes en botas, botines y sandalias.

Zapatos de tacón bajo: miden menos que los de tacón medio y son cómodos para recorrer largas distancias.

Zapatos de tacón con plataforma: además de tener un tacón, tienen una elevación en la parte delantera de la suela.

Zapatos de tacón kitten: son de tacón bajo, pero fino como el de aguja.

Zapatos de tacón cono: son tacones altos cuya forma es similar a la de un cono.

Zapatos de tacón cuadrado: son gruesos como los zapatos de plataforma, pero sin la plataforma delantera.

Zapatos de tacón corrido: el tacón ocupa toda la superficie de la suela.

Lesiones más frecuentes por usarlos
Según el traumatólogo, Carlos Sabaté en una entrevista concedida a ElDiario.es en junio de 2019, el uso de tacones constante puede producir desviación de las vertebras lumbares cuando el cuerpo está inclinado hacia adelante, aumento de desgaste articular en rodillas y tobillos provocando osteoartritis, esguinces de ligamentos o torceduras de tobillo, hipertrofia de los gemelos, reducción del tendón de Aquiles, entre otras.
En cuanto a los pies, se forman juanetes por ejercer mucha presión adelante, dedo de martillo cuando se atrofian el segundo, tercer y cuarto dedo por la compresión, crecimiento óseo en la articulación basal del dedo gordo y metatarsalgia cuando se inflama la parte delantera del pie.
Tips para caminar en zapatos de tacón
Algunos de los trucos más comunes para conseguir estabilidad y seguridad son los practicar en casa para que el pie se adapte a los zapatos, especialmente si son nuevos, usar plataformas para reducir centímetros de tacón y caminar o hacer sentadillas para que el pie no se canse y duela menos.
Para evitar heridas puede meter los tacones en una bolsa de plástico y dejarlos en el congelador por horas para que sean más amplios y cómodos, mojar la planta de los pies cuando se calientan por el mal fluido sanguíneo y aplicar talcos para que el pie se fije más al zapato y no haya rozaduras.
Tacones icónicos del cine
Zapatilla de cristal de Cenicienta.

Zapatos de Sandy Olson en Vaselina.

Las botas leggins de andrea, en El diablo viste a la moda.

Las botas de Vivian Ward en Mujer bonita.

Zapatillas escarlata de Dorothy, en el Mago de Oz.
