Australia estudia no enviar funcionarios a los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 debido al resonante caso de la tenista china Peng Shuai, informó el jueves el periódico Sydney Morning Herald.
“Es poco probable que el ministro de Deporte, Richard Colbeck, y la ministra de Relaciones Exteriores, Marise Payne, asistan” a los Juegos, escribió el periódico.
El boicot diplomático, como señala el medio, consiste en no enviar delegaciones oficiales a los juegos, pero permite la participación de los atletas.
Los políticos australianos piden al gobierno que boicotee los Juegos Olímpicos debido a la “creciente preocupación” por el caso de la tenista Peng Shuai.
Australia está siguiendo el ejemplo de su aliado EEUU, que el 18 de noviembre declaró que su Administración baraja la posibilidad de un boicot diplomático de los Juegos Olímpicos en Pekín.
Los británicos y los canadienses también están elaborando su posición sobre la cita olímpica de la capital china.
El periódico informó que “el gobierno australiano está esperando una decisión por parte de la administración Biden antes de unirse a un boicot diplomático, prefiriendo coordinar todos los pasos con otros países afines”.
El 2 de noviembre, Peng Shuai denunció en su perfil de la red social Weibo que había sido forzada a mantener una relación sexual con el antiguo vice primer ministro Zhang Gaoli.
Su post fue eliminado apenas 20 minutos después, pero alguien lo guardó y distribuyó en Internet, donde causó una gran resonancia publica.
La prensa estatal china guardó silencio, hasta que el jueves CGTN, el canal internacional de la cadena CCTV, divulgó un supuesto correo electrónico de Peng, en el que la tenista confirmó que todo está bien, y está descansando en casa.
Steve Simon, director ejecutivo de la Asociación de Tenis Femenino, reclamó a las autoridades chinas llevar a cabo “una investigación completa y transparente” de la denuncia de Peng y amenazó con cancelar los torneos de la WTA en China por la presunta desaparición de la tenista.