La Jornada de Ecología Integral del Minuto de Dios se convirtió en un espacio de reflexión y acción frente a los grandes desafíos ambientales del presente. Dividida en tres paneles y una muestra de ecoexperiencias, la jornada reunió a expertos del sector académico, público y empresarial, quienes coincidieron en la urgencia de avanzar hacia una conversión ecológica integral.
La ecología integral como cuarta ola del Minuto de Dios
El primer panel, moderado por la vicerrectora general académica Stéphanie Lavaux, abrió la discusión destacando que el cuidado de la casa común es hoy parte de la “nueva ola” del Minuto de Dios. El Padre Camilo Bernal presentó los ocho compromisos adquiridos en la COP16, entre los que se destacan la sensibilización ambiental, el fortalecimiento de la educación, la acción urgente frente al cambio climático y la promoción del desarrollo rural sostenible.
En esta línea, el Dr. Alirio Raigoso recordó que la crisis ecológica es un desafío del presente y exige una visión holística que supere la cultura del descarte. Por su parte, el Dr. Alirio Cáceres explicó la lógica de la Plataforma de Acción Laudato Si’, que articula siete objetivos en siete sectores durante siete años, un camino en el que el Minuto de Dios ya está participando activamente.
El sector público y la urgencia de políticas efectivas
El segundo panel, moderado por el Dr. Jaime Bernal Adad, situó la discusión en el terreno de lo público. Marcela Lozano, del Instituto Humboldt, mostró experiencias de gobernanza comunitaria, ciencia participativa y restauración social en territorios como Antioquia, Boyacá y Caquetá.
La académica advirtió sobre la “triple crisis planetaria” que combina cambio climático, pérdida de biodiversidad y degradación ambiental, insistiendo en que las soluciones deben ser inclusivas y territoriales.
El exministro Manuel Rodríguez Becerra fue categórico: la política ambiental mundial ha fracasado desde 1992 y Colombia aún tiene enormes retrasos en adaptación al cambio climático. Gisela Cheverry, directora del IDEAM, reforzó la idea mostrando datos que evidencian el aumento global de la temperatura y el peso de la deforestación en las emisiones nacionales. Finalmente, un mensaje en video del exministro Ricardo Lozano llamó a fortalecer el diálogo y la paz con las comunidades como parte de la agenda ambiental.
El aporte empresarial: circularidad y sostenibilidad
El tercer panel puso el foco en la empresa privada. Viviana Capera, de Eternit Colombiana, mostró cómo la compañía avanza en cero vertimientos, recirculación de agua y producción limpia con energía solar. Rubén Darío Lizarralde, desde la agroindustria, destacó la reutilización de biomasa para energía, la producción de biocombustibles y el potencial de la Orinoquía para generar empleo y sustituir cultivos ilícitos.
Ecoexperiencias que transforman territorios
La jornada también presentó múltiples experiencias que ya están en marcha dentro de la obra Minuto de Dios. Paul Cubillos, de la Corporación Educativa Minuto de Dios, mostró cómo los Proyectos Ambientales Escolares (PRAE) pueden convertirse en procesos de transformación vinculados a los ODS. FUNDASES, por su parte, explicó sus avances en biotecnologías aplicadas a la conservación de la biodiversidad, el tratamiento de aguas residuales y la gestión de residuos.
Proyectos de desarrollo rural sostenible en Putumayo, Tolima y la Amazonía; iniciativas productivas en el sector industrial y penitenciario; y la consolidación del Agroparque Sabio Mutis como espacio de investigación y conservación, fueron algunos de los hitos compartidos. También se destacó la alianza con el Jardín Botánico de Popayán, que apuesta por la apropiación social del conocimiento y la inclusión.
Un cierre con compromisos personales y colectivos
La jornada culminó con un taller de cocreación liderado por el Parque Científico de Innovación Social, que buscó trazar rutas de acción a partir de los compromisos asumidos en la COP16. Los asistentes identificaron conexiones entre objetivos y propusieron iniciativas integrales, dejando en evidencia que la ecología integral requiere trabajo articulado entre todas las entidades del Minuto de Dios.