
Por Daniela Romero Angarita
Desde enero del presente año el elevado precio de la papa se ha convertido en una problemática a nivel nacional, ya que su incremento ha sido de más del 50%, afectando principalmente a las familias colombianas y a los papicultores los cuales se ven en crisis al intentar salvar el producto y sus ingresos.
De acuerdo a cifras oficiales entregadas por Fedepapa, todas las clases de papa han elevado su precio, sin embargo, la variedad de papa que más se ha visto afectada es la criolla, ya que en diciembre de 2018 un bulto de 50 kilos costaba alrededor de $91.000 y hoy según los precios entregados por corabastos y fedepapa se consigue por $145.000, esto debido a la escasez que se da por el cambio climático.
“Las personas antes llevaban 5 libras de papa para un solo día, ahora se abstienen y llevan solo 2 libras” afirma Fanny Gómez, quien es dueña de un mini mercado. Esto muestra las graves consecuencias que han afectado a los vendedores y a los papicultores debido al alto costo de este producto.
La gran influencia que tienen los consumidores en las ganancias que reciben los agricultores en tiempos de sequía es negativa, pues con los precios tan altos nadie se ha beneficiado.
Así pues, se espera que a finales de abril se empiece a nivelar la sequía, por ende, el precio de la papa llegue a un valor más asequible y no se sigan presentando perjuicios en la economía nacional.