La jornada reunió a expertos, estudiantes y consejeros de juventud en un país donde, según la Registraduría Nacional y la Misión de Observación Electoral (MOE), más del 50 % de los jóvenes entre 18 y 28 años no vota.
Panel 1: El poder del primer voto
El primer espacio, titulado “Elegir nos hace grandes: el poder del primer voto”, contó con la participación de Hernán Penagos, Registrador Nacional; Danilo Sepúlveda, Coordinador del componente de Inclusión y Diversidad de la MOE; Catalina Acevedo, consejera de Juventud; y Nicolás Rodríguez, aspirante a Consejero de Juventud.
Con cifras contundentes, se recordó que en 2023 la abstención juvenil alcanzó el 58 %, a pesar de que los jóvenes representan el 26 % del censo electoral. Los panelistas coincidieron en que convertir el primer voto en un acto sostenido de ciudadanía activa es el gran reto de esta generación.
De cara a las elecciones del próximo 19 de octubre, el llamado fue a consolidar los Consejos de Juventud como semilleros de liderazgo y participación real, donde la voz de los jóvenes tenga incidencia en las decisiones locales y nacionales.
Panel 2: Democracia en la era digital
El segundo panel, “Algoritmos, redes sociales y desinformación”, analizó el papel de la tecnología en la vida política juvenil. Participaron Laura Camila Vargas, periodista y creadora de contenido; Andrés Páramo, periodista y miembro de Presunto Podcast; y Laura Sanabria, editora del Detector de Mentiras de La Silla Vacía.
Se destacó que, según cifras del DANE, el 94 % de los jóvenes entre 18 y 28 años se informa a través de redes sociales, y que seis de cada diez han estado expuestos a noticias falsas. El debate giró en torno a cómo transformar esa hiperconexión digital en una acción cívica informada, crítica y consciente.
Un llamado a la acción
Con entrada gratuita y transmisión nacional por las plataformas de LOS40, La fuerza del primer voto no solo invitó a los jóvenes a acercarse a las urnas, sino también a convertir el voto en acción colectiva, formación ciudadana y ejercicio crítico de la democracia.
El encuentro se consolidó como un espacio para cerrar la brecha entre la vida digital y la participación política real, reafirmando que los jóvenes son protagonistas de la transformación democrática que necesita el país.