Los residuos es una problemática que se vive en todos los países, produciendo al año 2.100 millones de toneladas de desechos cada año a nivel mundial. Sin embargo, el nuevo esquema de recolección de basuras ¿Es funcional? Es la pregunta que muchos se hacen ya que ha sido entendido por pocos y la distribución de los contenedores es inequitativa.
Monica Becerra, Juliana Correa, Hernán Velásquez, Ma Fernanda Moreno y Milena López
Las basuras en la capital han sido una odisea que ha vivido desde tiempo atrás, noticias que saltaron a las primeras planas de los periódicos y que fueron tendencia en redes y medios.
Como la pelea de honor que libró Gustavo Petro, quien tras un fallido plan de gobierno con el que buscaba, por medio de un cambio en el modelo de recolección de basuras, la defensa de lo público, priorizar lo ambiental y declararle la guerra a las mafias; Hecho que sólo lo llevó a que su cargo tambaleara apenas cuando llevaba un año de gobierno; en la actual administración dirigida por el Alcalde Enrique Peñalosa.
Bogotá, aunque sea la ciudad con mayor cobertura de recolección de residuos en el país y según el modelo es capaz de recolectar el ciento por ciento las basuras en la zona urbana y rural, la recolección de basuras sigue siendo un tema polémico.
ya sea por la distribución de 10.746 contenedores instalados en la ciudad, o simplemente el hecho de que pocos han entendido cuál es el correcto uso de los contenedores y qué se debe depositar en cada uno de ellos.
Los comentarios de la comunidad recicladora de la ciudad no han sido positivos para el nuevo modelo de recolección de basuras, pues los contenedores no son funcionales para su trabajo y el proceso de reciclaje se retrasa.