Luego de la muerte del Papa Francisco, comienza el período denominado Sede Vacante, tiempo que transcurre entre el fallecimiento o renuncia del Papa de turno hasta la elección del siguiente líder de la Iglesia Católica. Durante este periodo, el Cardenal Camarlengo se hace cargo de todas las funciones del sumo pontífice.
Esta etapa está estipulada en el Derecho Canónico y en la Constitución Apostólica Pastor Bonus de 1988 del Papa Juan Pablo II y que fue reformada en 2022 y en la Constitución Apostólica Universis dominici gregis publicada en 1996 por Juan Pablo II y actualizada por Benedicto XVI en 2013.
La elección de un papa comienza con la llegada de los cardenales a la capilla Sixtina a la que ingresan recitando el cántico “veni creator”. Una vez llegados todos, el cardenal Camarlengo irá hasta las puertas de la Sixtina y mientras las cierra pronunciará estas palabras: “Extra omnes” frase en latín que significa “todos fuera” o “que no quede nadie”. Se utiliza en el ritual del cónclave para marcar el inicio de la clausura de los cardenales en la Capilla Sixtina.
La elección se da entre 120 cardenales, que permanecerán aislados dentro de la Capilla Sixtina.
Luego cada cardenal hará el juramento con las manos sobre los Evangelios diciendo: “Et ego …cardinalis… spondeo, voveo ac iuro silentium” (yo, … cardenal … prometo, me obligo y juro silencio) añade: «Sic me Deus adiuvet et haec Sancta dei Evangelia quae manu mea tango» (Que Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco con mi mano).
La votación en varias ocasiones no se define en una sola ronda, se realizan varias hasta que los cardenales candidatos a ser Papa obtiene la mayoria de votos.
Características que debe tener el próximo Papa
Ser varón y bautizado
En teoría, cualquier hombre bautizado puede ser elegido Papa, pero en la práctica siempre ha sido un cardenal.
Ser miembro del Colegio Cardenalicio
Solo los cardenales menores de 80 años pueden votar en el cónclave y suelen ser también los únicos considerados como posibles papables.
Ser ordenado obispo
Si un cardenal elegido no es obispo (raro pero posible), debe ser ordenado obispo antes de asumir como Papa.