El especialista Johan Svenson afirma que la neosaxitoxina, que se encuentra en muchos moluscos, proporciona una oportunidad extraordinaria para reemplazar a los opioides.
Dos décadas de investigación se han llevado a cabo en esta área, pero todavía no ha sido posible obtener una cantidad suficiente de neosaxitoxinas de calidad.
Ahora el Instituto Cawthron, que realiza un largo estudio sobre el tema, descubrió que las algas cultivadas en contenedores secretaban la toxina requerida.
La primera fase de los ensayos clínicos con 80 personas mostró el efecto duradero de la toxina y un número limitado de efectos secundarios. Se requerirá una segunda y tercera etapa antes de que el medicamento pueda ser aprobado para su uso.