Por: Daniel Rojas Chía
Hijos de perra es una comedia que lleva al espectador a una aventura perruna que sigue a Reggie, un Border Terrier ingenuo y optimista que es abandonado en las calles de la ciudad por su desdichado dueño. Doug. Reggie está seguro de que su amado dueño nunca lo abandonaría, por eso decide emprender un viaje para volverse a encontrar con él.
En su aventura por regresar a su hogar, Alex se encuentra con un grupo de perros callejeros que han formado una especie de familia llena de conflictos, con una historia única que lo llevan a enfrentar sus propios desafíos en la vida callejera.
Al conocer al mal hablado Bug, un perro callejero que dice disfrutar su libertad y cree que tener dueño es para perros perdedores, Reggie se da cuenta que estaba en una relación tóxica y empieza a ver a Doug como un desgraciado, que decide buscar venganza.
Dirigida por Josh Greenbaum y producida por Phil Lord y Christopher Miller, responsables de grandes títulos como Lluvia de hamburguesas (2009), Lluvia de hamburguesas 2 (2013) o las maravillosas Lego movie (2019 y The Mitchells vs. the Machines (2021), en esta ocasión llegan con una historia que más allá de hacer reír, habla sobre el maltrato animal por abandono, y cómo los seres humanos quieren humanizar a toda costa a sus mascotas a fin que se parezcan a ellos mismos, en un ejercicio de ego que se ha naturalizado.
Más allá de lo cinematográfico que por momentos es muy limitado, con una historia lineal, predecible y presentada sin mayores sobresaltos, Hijos de perra es una película que acude repetidamente a las malas palabras para captar la atención del público, que dejan momentos graciosos, que sin embargo se estancan en la repetición del mismo argumento, descargando casi toda la tensión en escenas que pueden tornarse desagradables, sin dejar de lado elmaltrato hacia los animales, con dosis de humor que parecen superficiales, pero que al final están latentes.
Una cinta simple y llena del sentido del humor humano desde la posible visión del mejor amigo del hombre, que propone una idea importante que por momentos puede desvanecerse. Eso sí, sin duda le sacará una que otra risa.