Iván Duque Márquez, nuevo Presidente de la República de Colombia, brindó un discurso de 52 minutos, en el que justificó a los colombianos la forma en la que va gobernar. Hizo una recolección de datos del pasado, contrastando la situación actual y asegurando un futuro para el país con él como presidente.
Desde el inicio de su discurso, promulgó ante los colombianos que “hoy llega a la Presidencia de Colombia una nueva generación, motivada por el servicio y no por el ejercicio vanidoso del poder, comprometida con el futuro y sin anclas en prejuicios del pasado, inspirada en la justicia social y en la seguridad como el cimiento de nuestras libertades, y dedicada a promover el entendimiento, el trabajo en equipo y la construcción de consensos”.
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Además, indicó que su deseo de gobernar a Colombia está regido por valores y principios inquebrantables, que superen las divisiones de izquierda y derecha, que una al país y que corrija los errores del pasado para construir un nuevo futuro.
“En alguna ocasión el célebre Darío Echandía se preguntó: ¿El poder para qué? Su humildad elocuente era una invitación para reflexionar y no olvidar que gobernar es un camino que sólo deja legados cuando se cimienta en los principios”, dijo Duque.
De igual forma, asumió su cargo bajo el compromiso de la historia colombiana, teniendo en cuenta que el próximo año se celebrará el Bicentenario de la Independencia de Colombia, bajo la premisa de que “este será el gobierno del Bicentenario y todos construiremos la Colombia del Bicentenario”.
Asume su cargo con motivación y optimismo, recibiendo una Nación para enfrentar la realidad y asumir los enormes retos. Asegura también que recibe un país convulsionado, con muchas falencias a nivel político, económico, social; y que sobre todo está golpeada por la violencia; pero que asume como reto para construir un mejor país.
“Los invito a que todos construyamos un gran pacto por Colombia, a que construyamos país, a que construyamos futuro y a que por encima de las diferencias estén las cosas que nos unen”.
Duque, sostuvo durante su discurso, que no quiere que todos piensen igual, que no se trata de unanimismos, sino que por el contrario, las diferencias se reconozcan sanamente y que de esa manera se enriquezca la democracia.
Entre sus pactos, prometió al pueblo colombiano que habrá una reforma en la legalidad, el emprendimiento, la equidad, el ambiente, la ciencia, el futuro y la perspectiva de Colombia ante el mundo.
Hizo, además, un recorrido por los recientes sucesos de violencia que han aquejado al país y sostiene que “se debe defender la vida de todos los colombianos y proteger la integridad de los líderes políticos y sociales y de nuestros periodistas. Nos duele cada homicidio, cada ataque, cada amenaza. Vamos a trabajar con la Defensoría del Pueblo, con la Procuraduría General de la Nación y con la Fiscalía para prevenir la violencia contra ellos y sancionar ejemplarmente a los autores intelectuales y materiales de los crímenes e intimidaciones que han enlutado a nuestro país”.
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Para concluir su discurso, el presidente Iván Duque, reconoció la labor que tiene su gabinete, de Marta Lucia Ramírez como vicepresidenta, agradece a sus padres las enseñanzas, le manifiesta a su esposa y a sus hijos su amor y la motivación que son para él.
“Los invito a que construyamos país, porque este es el esfuerzo de todos. Los invito a que no dejemos que nadie nos arrebate este sueño. Que Dios bendiga a Colombia”.