Por María Nelly Lenis Rubio
El barrio El Peñón, ubicado al Oeste de Santiago de Cali, en una zona fresca y tradicional que invita al transeúnte a dejarse acariciar por la brisa fresca que viaja por la ciudad y a arrullarse del sonido ondeante del río que lleva su nombre. Es una zona frecuentada en su mayoría por ciudadanos de estrato 5 y 6 de la ciudad que aprovechan la ribera del río para contemplar lo que ofrece el lugar. Desde hace unos años sus antiguas casas se transformaron en paladares testigos de obras gastronómicas de espléndidos chefs que han dejado volar su imaginación para combinar los emblemáticos sabores del Valle del Cauca con la cocina internacional y así crear una fusión de sabores que explotan en las papilas gustativas de quien las prueba.
Es obligatorio pasar por el barrio si se visita la ciudad, no hay excusa para no ir. Ahí se encuentra, además de restaurantes variados en su carta, el Museo La Tertulia, con exposiciones envidiables de artistas locales, nacionales e internacionales a una tarifa muy económica dónde es posible apreciar fotografías, pinturas, esculturas y talleres para todos los gustos y edades.
Este panorama tiende a cambiar por el plan piloto que ha propuesto la Secretaría de Movilidad del Municipio en el barrio donde se han instalado 241 sitios regulados para automóviles y 62 para motocicletas que se estacionen en un lugar delimitado llamado ZERT y donde se le entregará un tiquete con el valor del tiempo que se esté parqueado, por ahora en estudio, si será la tarifa cobrada por media hora o completa; se llevará a cabo desde el primero de octubre, esto en cumplimiento a al acuerdo 0452 definido por el Concejo Municipal, cuyas rentas serán destinadas al financiamiento y la sostenibilidad del transporte masivo SITM- MIO.
Los vecinos, comerciantes y turistas protestan por el cobro que se va a realizar desplazando el interés del lugar y afectando la economía que lo sostiene.
El barrio se ha convertido en un sector turístico, razón por la cual los propietarios de locales comerciales y restaurantes señalan que la asistencia de público se verá afectada con la disposición de cobro en zonas de parqueo.
En el parque, todos los domingos desde hace más de dos décadas, se reúnen artistas locales y vecinos del barrio para exponer sus trabajos con el fin de que el turista se tome un champús, deguste una empanada con ají y compre algo de “cultura caleña” en medio de una exposición al aire libre con la facilidad de contemplar curvas y colores trazados por pinceles inspirados en el calor del sabor de la Cali sencilla.
El Peñón es un barrio que lleva el recuerdo en todos los colombianos, porque fue ahí donde se ubicó la fábrica de gaseosas Postobon en 1904; también está la casa del padre de Jorge Isaacs, donde se cuenta, escribió el final de su recordada novela La María.
La invitación que hacen los residentes y quienes están en la parte comercial es que todos los que tienen al barrio El Peñón como destino turístico para pasear, conocer, pasar la tarde, comer u hospedarse no lo duden y mucho menos lo dejen de frecuentar. El Peñón tiene mucha cultura que ofrecer y unos miles de pesos no deben ser excusa para voltear la cara de la zona favorita de muchos.