Por: Juan Pablo Dueñas, Luisa Bejarano y Nicolás Beltrán
Bosa es una de las localidades de Bogotá que se ve afectada por la acumulación de escombros y basuras en barrios vecinales, lo que genera que en la capital se acumulen diariamente escombros y basuras por malas costumbres; sin embargo, gracias a esfuerzos como los de Fanny Neuta en Bosa, que trabaja por el aseo y mantenimiento de sus calles, muchas de las localidades de Bogotá han sido beneficiadas con programas de recuperación en los espacios públicos.
Fanny Neuta, vicepresidenta y líder comunal del Barrio San Eugenio contó en entrevista, sobre su trabajo con la Junta de Acción Comunal JAC en la laboriosa y, como lo describe, “difícil” tarea de limpiar las calles de basura y escombros, peligrosos para la sociedad:
Las personas, cuando hacen construcciones, sacan los escombros cuando quieran. La gente nos ha colaborado con dejarlos ahí en su casa y si son escombros residenciales sabemos que tienen que llamar al 110 y reportar, luego viene el LIME (Empresa de aseo capital) a recogerlos; cuando son escombros clandestinos entonces ya es más fácil porque se hace la llamada, un seguimiento con dirección y llegan a recogerlo
Fanny Neuta
Según cifras de la Alcaldía de Bogotá, las localidades de Bosa, Antonio Nariño, Barrios Unidos, Candelaria, Chapinero, Engativá, Fontibón, Mártires, Rafael Uribe, San Cristóbal, Santa Fe, Teusaquillo y Usme concentran los más graves problemas de acumulación de basuras en Bogotá.
La ciudad sufre de estas problemáticas y es por eso que la Alcaldía está diseñando programas, que como mencionaba la líder Fanny, tienen el respaldo del LIME y otras organizaciones dedicadas al aseo de la capital. Los ciudadanos seguramente ven a diario basuras, escombros y daños en gran medida ubicados sobre las carreteras, es por este motivo que, con el proyecto “Vigías Ambientales” de la Alcaldía de Bogotá, se está recorriendo la capital buscando e interviniendo estos escombros que hacen daño a la sociedad. Cristian Zarate, vigía ambiental de la zona, resume el objetivo del proyecto ambiental:
Este proyecto se basa en dos pilares fundamentales; el primero la reactivación económica en la obtención de empleos para todas las personas en general y, el segundo, la recuperación de los espacios públicos bajo el entendido de la conciencia ambiental y bajo un proyecto ambiental; este proyecto básicamente es un plan distrital que se está aplicando en todas las localidades de la ciudad de Bogotá con los mismos principios producto de la pandemia Covid-19 y para promover la conciencia ambiental en todos los bogotanos y de la mano generar la recuperación de los espacios ambientales
Según la más reciente cifra, en Bogotá se dispusieron 11.09 millones de toneladas de residuos de escombros, de manera adecuada. Es decir, casi 300 mil menos con relación a las 11.37 millones de toneladas recolectadas en 2020 en toda Bogotá y esto no es más que una confirmación de la conciencia ambiental que generan grupos como los liderados por Cristian Zarate. Todos los esfuerzos de los líderes en muchas ocasiones no se ven reflejados, pero no es el caso de las personas que trabajan por el medio ambiente, pues la realidad mundial refleja que día a día son más las personas que han decidido cuidar el medio ambiente y controlar favorablemente los mecanismos de sostenibilidad ambiental que depende de cada ser humano. Fanny Neuta menciona algo que, además de ser merecedor de un reconocimiento, demuestra estas acciones de la vida cotidiana de unos de los causantes:
A veces la mayoría de los muchachos me hacen caso, uno les dice “mire es que tal cosa” “colabórenos” sabemos que es el trabajo de ellos porque la mayoría devenga de ese reciclaje y sí, últimamente se ha visto el orden en la cuadra, se saca la basura los días que son y los carros del LIME nos colaboran con dejar todo organizado
¿Qué pasa con espacios dónde aún no se han visto cambios?
En la capital colombiana se está trabajando por el cuidado de estos espacios donde los escombros y las basuras abundan exponencialmente, sin embargo, hay espacios de Bogotá que siguen sufriendo estas problemáticas; este es el caso del Jardín Infantil los Cedros, ubicado en la localidad de Bosa, que reportó hace poco más de un año inconvenientes porque a la entrada del Jardín estaban escombros y basuras que impedían el paso, además de ser un peligro para las niñas y niños que frecuentaban el jardín; los roedores, virus, bacterias e inundaciones son el pan de cada día para este Jardín y desde la Junta de Acción Comunal hablan sobre su labor con espacios así, que no son únicamente en Bosa. Esta problemática afecta a miles de jardines infantiles en Bogotá.
Ese jardín se construyó en el 2010. Con la ayuda de la junta y del señor Jorge Duque se logró la construcción y nos ha afectado porque se formó basuras, pues la gente saca cosas y al ver que hay niños ahí, no tienen en cuenta esa situación. Las familias y padres de familia han dicho ‘por favor, miren que no boten la basura ahí porque eso afecta más que todo a los niños’ a inicios de la pandemia sabemos que ningún niño fue al jardín, pero ahora ya están volviendo y les afecta esa situación, entonces ya se recogió el reguero y ya se limpió ahí
Explica Fanny Neuta.
En Colombia la industria de la construcción consume el 40% de la energía; genera el 30% del CO2 y el 40% de los residuos y consume el 60% de los materiales extraídos de la tierra, según cifras de 2017 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible: “Las cifras demuestran la necesidad del sector de mejorar sus prácticas sostenibles, lo que va de la mano con la Resolución 01115 de diciembre del 2012; el Decreto 1609 del 2002, y el Decreto 4741 de 2005, donde se reglamenta la correcta gestión integral de los residuos de demolición y construcción” Así pues, el desarrollo de estos ejercicios de limpieza de escombros, material de obras y basuras hace que, con el esfuerzo de millones, Bogotá sea una capital limpia.