Según la nota oficial, los dos coincidieron en que “el restablecimiento de la democracia en Venezuela, la normalización institucional y el respeto a las libertades fundamentales del pueblo venezolano son condiciones necesarias para superar la crisis multidimensional que azota al país y preservar la estabilidad de la región”.
Además, aseguraron que en última instancia se requerirá la convocatoria de unas elecciones presidenciales “libres, justas y transparentes”, con garantías de participación de todas las fuerzas políticas y bajo una observación internacional objetiva.
En este sentido, reconocieron los esfuerzos de las fuerzas democráticas venezolanas en el marco del proceso de negociación entre el Gobierno y la oposición para “restaurar la democracia” en el país.
Los dos se congratularon por los esfuerzos de ambos países para acoger a los migrantes y refugiados venezolanos (con la “Operación Acogida” en Brasil y el “Estatuto Temporal de Protección” en Colombia) y se comprometieron a seguir compartiendo experiencias y buenas prácticas en este ámbito.