David Stiven Peralta Velasco
El jueves 19 de marzo me alistaba para ir a la última clase de la semana a la Universidad Minuto de Dios a presentar un parcial; llegué y mientras subía las escaleras con afán, recordaba a la mamá de las decenas de escalones que tuve que pisar para llegar al quinto piso, como si las escaleras tuvieran madre; llegué prontamente a saludar a mi amiga y la compañera de grupo cuyo nombre no recuerdo. Presentamos el parcial y nos fuimos con alegría a nuestras casas sin reparo alguno. ¿Cuánto hubiese aprovechado ese último día para disfrutar cada escalón, cada espacio de la universidad y conocer el nombre de aquella compañera si hubiera sabido que quizás tendría que culminar mi carrera en modalidad virtual? Seguramente muchos piensan igual que yo.
He encontrado la forma de mantenerme en contacto con mis compañeros y disfrutar en lo posible de la vida universitaria. Por otro lado, cuando salgamos finalmente de la cuarentena disfrutaré de la Universidad presencial como si fuese el primer día. Sin embargo, eso me recuerda la capacidad de normalizar y olvidar nuevamente lo importante, habilidad que tiene el ser humano. A modo de ejemplo pondré la Primera Guerra Mundial, en la cual sufrieron un sinfín de personas que sacrificaron su vida para defender los intereses de una minoría y mucho más la vieja Alemania. Pero reorientemos esta reflexión de lo humano a lo económico para tener una visión desde otro ángulo.
Cuánto dinero no se gastó para financiar la primera guerra para perderla y reconstruir lo destruido; seguramente los civiles y líderes sobrevivientes en su frustración, en medio de la derrota, entendieron que la guerra no es un camino viable y adecuado para solucionar los problemas y eso, supongo, fue lo que el resto del mundo entendió, pero no bastaron un poco más de dos décadas para repetir la historia. Mi respuesta a qué pasará con el mundo después de la pandemia, es que seguirá siendo el mismo, las personas volverán a sus viejos hábitos pues creo que somos una sociedad resiliente pero sin memoria.