Las autoridades de Canadá han declarado el estado de emergencia en la ciudad de Kelowna, situada al sureste del país. Así mismo, en la zona norte se encuentra un incesante avance del incendio forestal en la ciudad de Yellowknife, donde trabajan a contrarreloj para poder evacuar a los ciudadanos a causa de las llamas.
Ya han tenido que ser evacuadas algo más de 2.500 personas ante el rápido avance de las llamas en la ciudad de Kelowna, y además han tenido que poner bajo aviso a unos 5.500 viviendas ante el descontrolado avance del incendio. Asimismo, una autopista ha tenido que ser cerrada y las autoridades alertan de que lo que pueda ocurrir en las próximas horas puede ser decisivo.
Las condiciones meteorológicas que se están produciendo en estas regiones, están marcadas por altas temperaturas y por vientos muy fuertes que pueden provocar la rápida extensión de las llamas considerando la estación de verano que esta viviendo el hemisferio norte.
Yellowknife, que tiene más de 20.000 habitantes tiene como plazo máximo hoy viernes por la noche para poder salir de la capital, según han comunicado las autoridades, que también han alertado que no esperen hasta el último momento para hacerlo.
Se han organizado vuelos para evacuar la ciudad
Las autoridades también han organizado algunos vuelos para todas aquellas personas que no pueden salir de la capital por carreteras, por lo que este jueves unas 1.500 personas han podido ser evacuadas gracias a estos vuelos proporcionados.
Del mismo modo, se prevén que 1.800 plazas sean utilizadas para salir de la ciudad este viernes. Este hecho ayudará, especialmente a todas aquellas personas que requieren un tratamiento médico especial, a los reclusos o a los trabajadores de las cárceles.
Las autoridades de la región, que emitieron la orden de evacuación el miércoles por la noche y dieron a los residentes hasta el mediodía del viernes (3 de la tarde hora argentina) para salir, estiman que alrededor de 1.500 residentes ya abandonaron la zona por vía aérea, mientras que otros cientos huyeron utilizando la única ruta que conecta las comunidades del norte con Alberta, provincia vecina localizada al sur.
El viernes se dispuso el doble de vuelos que el día anterior para permitir evacuar a los residentes del norte que aún permanecen allí.
Pero la ruta era este viernes una larga caravana de vehículos que avanzaba a paso de hombre alimentando el temor de las autoridades de que el fuego corte la carretera antes de que todos logren pasar.
En los aeropuertos, había colas de tres horas para abordar un avión y cientos de pasajeros fueron rechazados porque los vuelos están repletos.
Las autoridades, sin embargo, tranquilizaron a la población el jueves por la noche, diciendo en rueda de prensa que los vuelos continuarían más allá de la fecha límite anunciada.
“Seguiremos adelante hasta que podamos sacar a todos de Yellowknife”, dijo Jennifer Young, de los Servicios de Emergencia de los Territorios del Noroeste.