La apuesta cinematográfica de los directores Álvaro Perea y Juan Pablo Salazar, ‘Una selfie con Timochenko‘, podría ser arriesgada y novedosa, la idea parte de hacer un falso documental acerca de los últimos días de la guerra en el país, puede herir susceptibilidades frente al pos acuerdo con las FARC, que lo ven como una amenaza latente representada por el fantasma del ‘castrochavismo‘. Esta cinta presenta un escenario de reconciliación y respeto frente a las diferencias existentes entre los ex combatientes y la sociedad civil.
De allí parte el argumento de esta historia que busca crear conciencia frente a la realidad, realizando un paralelo con el proceso de paz en Rwanda, mientras se entrelaza con la historia de Juan Pablo, el funcionario de rango medio de la presidencia de Colombia, quien cede ante los encantos de Natalia, la famosa actriz y presentadora, que desea conocer más de cerca el proceso de paz en Colombia y sus similitudes con el conflicto del país africano.
Para la talentosa actriz Natalia Durán, coprotagonista de la cinta, el objetivo principal “es enviar un mensaje para la construcción de un nuevo país…con un tono satírico y respetando siempre a las víctimas”, este proyecto cinematográfico llegará a salas de cine seleccionadas el próximo jueves primero de marzo.