El presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, exigió que sea la Unión Europea la que financie los vuelos para evacuar a los migrantes ilegales atrapados en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, a sus países de origen.
“Qué pague la UE”, afirmó Lukashenko, al destacar que de momento Bielorrusia está prestando ayuda a los migrantes a su expensas.
El presidente bielorruso tachó de “canallas” a los líderes europeos y declaró que Minsk no recibió fondo alguno de lo que asignó Europa para resolver la crisis migratoria actual.
Por su parte, un representante de Iraqi Airways, Hussein Jalil, dijo a Sputnik este jueves que un vuelo de evacuación para los refugiados fue pospuesto por un período indefinido, a solicitud del Ministerio de Exteriores de Irak.
El 18 de noviembre, Iraqi Airways realizó el primer vuelo para evacuar ciudadanos iraquíes, que intentaban entrar en la UE a través de Bielorrusia. El cónsul iraquí en Rusia, Majid al Kilani, precisó entonces que 431 personas aprovecharon ese vuelo.
La situación en la frontera bielorruso-polaca, donde se congregaron miles de migrantes, en su mayoría procedentes de Irak y otros países de Oriente Medio que pretenden cruzar a la UE, se agravó a inicios de noviembre.
Las autoridades polacas han aumentado la seguridad fronteriza, reforzándola con el Ejército y frustrando los intentos de los inmigrantes irregulares de entrar en el país, y acusan a Minsk de provocar una crisis migratoria con fines políticos.
Minsk rechaza las acusaciones, alegando que Varsovia está expulsando por la fuerza a los migrantes.