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Muere Tony Bennett, la última gran voz de la vieja escuela del siglo XX, a los 96 años

En un día triste para el mundo de la música, el legendario cantante Tony Bennett, uno de los más grandes intérpretes del siglo XX, ha fallecido en Nueva York a la edad de 96 años.

Bennett, conocido como el último gran crooner clásico activo desde la década de los cincuenta, dejó un legado musical que ha cautivado a audiencias intergeneracionales durante siete décadas ininterrumpidas.

Nacido como Anthony Dominick Benedetto en el seno de una humilde familia de inmigrantes calabreses, su pasión por la música se manifestó desde una edad temprana debido a su dulce y temperada voz. Sin embargo, la trágica pérdida de su padre cuando tenía solo 10 años, llevó al joven Tony a asumir responsabilidades económicas para ayudar a su familia. A lo largo de su vida, desempeñó diversos trabajos relacionados con la música, desde actuar como niño prodigio de la canción hasta trabajar como camarero-cantante en restaurantes turísticos.

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El punto de inflexión en la carrera de Bennett llegó cuando la icónica cantante y actriz de Broadway, Pearl Bailey, lo descubrió y luego el famoso comediante Bob Hope lo llevó de gira. Fue entonces cuando Tony Bennett cambió su nombre artístico de Joe Bari a Tony Bennett, un nombre que se convertiría en sinónimo de elegancia, clase y talento vocal.

En 1951, Mitch Miller, ejecutivo de Columbia Records, lo fichó para su compañía y lo orientó hacia un repertorio más popular y menos jazzístico, lo que le valió una gran popularidad en la década de 1950. Con éxitos como “Because Of You”, “Cold Cold Heart” y “Stranger In Paradise”, Bennett dominó las listas de ventas y se convirtió en uno de los cantantes más admirados de la época.

A pesar de la llegada del rock and roll en los años 60, Bennett continuó triunfando en la música, y en 1962 grabó la hermosa balada “I Left My Heart In San Francisco”, que le valió dos premios Grammy y se convirtió en una de sus canciones más icónicas.

A medida que los años avanzaban, Bennett mostró su capacidad camaleónica para adaptarse a diferentes estilos musicales y audiencias. Durante los años 70, sufrió altibajos artísticos y personales, pero su carrera resurgió gracias a su hijo, Danny Bennett, quien se convirtió en su representante y lo ayudó a alcanzar nuevas audiencias más jóvenes.

En las últimas décadas de su carrera, Tony Bennett demostró su vigencia y contemporaneidad al colaborar con artistas como Amy Winehouse, Lady Gaga, y el colombiano Juanes, con quienes grabó exitosos álbumes de duetos. Estas colaboraciones le permitieron mantenerse en la cima de la música y ganarse el respeto y la admiración de nuevas generaciones de fanáticos.

Aunque padecía alzhéimer desde 2016 y se vio obligado a retirarse de los escenarios en 2021, Tony Bennett nunca dejó de ser un ícono musical. Su legado perdurará en sus cerca de 70 álbumes de estudio y su impresionante colección de 20 premios Grammy, incluido el reconocimiento a toda su trayectoria.

Hoy, el mundo de la música llora la pérdida de un verdadero maestro de la canción y un caballero de la música. Descansa en paz, Tony Bennett, tu voz perdurará para siempre en nuestros corazones y en la historia de la música.

| Nota del editor *

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