Por: Sharif Valentina Castro Pedreros
El proyecto Soto Norte de Minesa que cuenta con el respaldo de Mubadala Investment Company, una empresa de extracción minera que pertenece a los Emiratos Árabes Unidos, busca obtener una licencia ante la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, para construir una mina subterránea en el páramo, con el fin de extraer durante 23 años, toneladas de rocas que contienen minerales preciosos.
El Gobierno considera importante el proyecto, para la reactivación económica del país, ya que generaría una ganancia alrededor de 4.500 millones de dólares, al mismo tiempo que produciría más de 12.000 empleos para la población.
Sin embargo, los ciudadanos no están de acuerdo con la Minesa, ni con los dirigentes del país, así lo afirma Juan Hernández: “Santander brinda recursos naturales esenciales para la supervivencia, todo el mundo está en contra del Gobierno, pero no nos escuchan, a ellos solo les interesa la venta con las empresas mineras porque ellos se están lucrando, pero no les interesa el pueblo”.
Según un estudio de investigación científica sobre la actividad minera y la explotación ilícita en los ecosistemas del territorio colombiano, este proyecto afectaría el agua de una quebrada que abastece el acueducto de la ciudad, además de que disminuiría los caudales, recargará el tránsito en las vías públicas, acabaría mucha vegetación en donde la tala es prohibida y dañara el suelo en donde se quiere llevar a cabo el proyecto, porque este no tiene vocación minera.
Así mismo, el diputado de Santander Ferley Sierra afirma, lo siguiente: “además del daño ambiental, también podría generar daños sociales como levantamientos de grupos armados, prostitución, inseguridad, el costo de vida que traería esa misma realidad, entre otras cosas”.
Estos son los daños que se pueden generar en las comunidades que viven alrededor del páramo. Además, otro argumento de la ciudadanía que está en contra del proyecto minero es que los medios de comunicación no informan bien de los problemas que puede producir este programa y a veces no transmiten noticias relacionadas con esta situación.
De esta manera lo confirma María Fernanda Pedreros, habitante del departamento de Santander: “No tengo ningún conocimiento sobre el tema, la verdad aquí los medios de comunicación no hablan sobre esos temas”.
Por eso, los organizadores que defienden el páramo de Santurbán hacen un llamado a la población a utilizar las redes sociales porque son los medios de socialización más importantes que tienen los ciudadanos para distribuir el mensaje de lo que está pasando o lo que puede pasar.
Además, el presidente Iván Duque aún no se ha pronunciado de manera formal sobre este tema y muchas personas están en la expectativa de que lo haga, así lo afirma Jessica Villamil: “Debemos unirnos y no permitir que destruyan el páramo de Santurbán, pues al Gobierno y al presidente se les olvidó la promesa de cuidar los páramos, a ellos no les importa la gente”.
Si bien ya ha pasado mucho tiempo desde que el presidente hizo esa promesa, la ciudadanía aún la recuerda, que según con el Portal de Colombia Check la realizó, el día 11 de abril del 2018, en un Foro por la Democracia, en donde Duque afirmó: “No vamos a permitir minería en ninguna zona delimitada de páramo de Colombia, eso tiene que ser categórico”.
Por eso, la indignación por parte del comité para la defensa del páramo de Santurbán, activistas, políticos y ciudadanos cada vez es más grande, por este motivo, ellos decidieron unir sus fuerzas para interceder por esta meseta, a través de movimientos sociales organizados principalmente por redes sociales. Esto con el fin de que el Gobierno y el presidente cumplan con sus promesas y escuchen al pueblo, para que representen y defiendan los intereses de los ciudadanos.