Netflix da catedra de cómo se hace la adaptación de una serie animada al live action. Hablamos de One Piece, una serie que despertó altas expectativas por los usuario de la plataforma. One piece es mucho más de lo que la mayoría esperaba. Los comentarios de la primera temporada han sido muy positivos por parte de fans del manga y del anime. Así que con esta respuesta no es sorpresa que el show en estos momentos sea uno de los mejores estrenos globales en la historia de Netflix.
‘One Piece’, es una obra escrita por Eiichiro Oda y tiene el récord mundial como el libro más extenso de la historia. Su adaptación anime lleva más de 1000 episodios desde sus inicios en 1999, y las aventuras de Monkey D. Luffy por ser el rey de los piratas no para de crecer y de la misma manera cada vez más fanáticos se unen a sus aventuras.
Una de las tareas más difíciles, fue contar la historia de 95 capítulos en tan solo ocho episodios de una hora de duración, fue uno de los trabajos más complicados para la plataforma. One Piece se ambienta en la Gran Era de la Piratería, en un mundo poblado por piratas, monstruos y superhéroes. De este peculiar mundo surge Monkey D. Luffy (interpretado por Iñaki Godoy). La serie gira en torno a las aventuras de este para encontrar el tesoro de One Piece y convertirse en el Rey de los Piratas.
La serie parece tener satisfechos a la mayoría de sus seguidores, además de haberse convertido en el contenido más visto en su primer fin de semana. Esta adaptación ha sido, desde su lanzamiento el 31 de agosto, la serie más vista de Netflix en 84 países. De esta forma, el live-action de One Piece supera a dos grandes producciones de la plataforma: Stranger Things y Merlina, que en su momento fueron las series con más reproducciones en 83 países durante su primer fin de semana de estreno.
El éxito de One Piece no es una sorpresa, la serie se mantuvo como una tendencia en Twitter y fue el tema de conversación de plataformas como TikTok e Instagram. La mayoría de fanáticos estaban impresionados con la capacidad con la que recrearon personajes o momentos icónicos de la serie o de los cambios que hizo la versión de Netflix. Uno de los mejores ejemplos, es la versión más ‘oscura’ de Buggy el payaso pirata, pues probó ser muy popular con los fans de la serie que amaron como introdujeron el personaje a la serie.
Este proyecto en Live-Action de ‘One Piece’ comenzó en 2017 pero fue hasta el 2020 cuando Netflix lo anunció oficialmente y el sueño se hizo realidad.