Por Alejandro López Arias
“Coomeva EPS S.A. dilata el cumplimiento de sus obligaciones con tramitología, arriesgando la vida de sus usuarios”. Expresa Juan Pablo Mantilla, hermano y abogado del comunicador quien desafortunadamente padece un tumor maligno que afecta la órbita de su ojo izquierdo. Dicho diagnóstico tuvo que ser costeado de manera particular tras diversas valoraciones equivocadas realizadas por médicos de la entidad.
Además, de las erróneas valoraciones dadas por Coomeva EPS S.A. en el caso del periodista, la EPS no ha acatado el fallo de tutela emitido por el Juzgado 18 Penal Municipal de Control de Garantías, que ampara la integridad física y salud del periodista y obliga a esta entidad a ejecutar en una clínica de la capital los procedimientos para intervenirlo de un infrecuente caso de cáncer. El proceso de tutela, que usualmente demora 10 días, tardó más de 3 meses en ser resuelto.
“Mi hermano se vio obligado a entutelar para reclamar la atención de calidad y oportuna por parte de la EPS, pero esto no ha motivado a los funcionarios de la entidad a cumplir con la ley, con lo cual el representante legal podría ser arrestado, pues está incumpliendo la orden judicial que establece un tratamiento integral y con sujeción a las prescripciones del médico tratante” dice el abogado.
La urgente intervención y de primordial carácter se debe realizar para evitar el riesgo de compromiso de otras áreas y órganos de la cabeza o de metástasis en el cuello o el tórax. “Son unos asesinos. No les importan las consecuencias físicas o psicológicas de su negligencia. Si no realizan la operación con celeridad el riesgo de perder mi ojo o, peor aún, mi vida, es cada vez mayor”, denunció el periodista.
En junta médica realizada en la Fundación Santa Fe de Bogotá, lugar recomendado por el cirujano de cabeza y cuello de la EPS debido a su experticia en este tipo de patologías, el equipo médico propuso solicitar que el paciente fuese remitido a la mayor brevedad, para evitar la progresión de la enfermedad hacia el ojo izquierdo, que por el momento y en un vago diagnostico no ha sido afectado. El procedimiento para salvar la vida de Iván Mantilla, sin incluir los tratamientos de radioterapia, quimioterapia y futuros exámenes, tiene un costo de más de $80 millones.
“Jamás pensé que tuviera que luchar por mi vida de esta manera. Duré más de 1 año con un diagnóstico erróneo y ahora que tengo el dictamen correcto, no pasa nada. Hoy entiendo a muchos colombianos que han sido víctimas del carrusel de la muerte en las EPS”, dijo el periodista.