Por: Maritza Lozano.
La abdominoplastia, se encuentra en el cuarto lugar de las cirugías más apetecidas en Colombia, después de la liposucción, la mamoplastia y la blefaroplastia.
El ejercicio, las cirugías plásticas y los métodos estéticos son comunes para aquellos que quieran lucir una buena figura. En el país, se pueden efectuar al año 23.167 casos de este procedimiento, porque la disminución abdominal es uno de los principales deseos de las personas.
El doctor Luis Devoz, miembro de la American Society of Plastic Surgeons y de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica, explica en qué se diferencia una abdominoplastia, de una liposucción y qué se debe tener en cuenta.
“Es una cirugía de contorno corporal para manejar el exceso de grasa y de piel, se diferencia de una liposucción, porque esta es una intervención que solo es para extraer cantidades de grasa, no cortamos el exceso de piel, en cambio en la abdominoplastia, podemos cortar la piel que está sobrando, amarramos los músculos y manejamos las otras estructuras del abdomen”.
Este procedimiento se debe realizar en una clínica especializada en cirugía plástica, con profesionales calificados y con todo un equipo de sala, teniendo la seguridad del paciente.
Durante la operación y después de aplicar la anestesia general, el cirujano hará un corte a través del abdomen para abrir la zona y será efectuada exactamente por encima del área púbica.
“Como toda cirugía, la abdominoplastia puede tener riesgos, por ejemplo, que la herida se abra, que cicatrice mal, que se infecten las heridas, que sangre un poco, pero en realidad por la experiencia y las precauciones, estos riesgos se van a minimizar. Es una cirugía que debe tener una preparación indicada por los profesionales, el procedimiento puede durar entre dos y cuatro horas, dependiendo si se necesita extenderla hacia la parte posterior para manejar el contorno cuando hay exceso de piel hacia los lados.”, agrega el doctor Luis Devoz.
Tiene entre uno y tres días de periodo de hospitalización, y un postoperatorio aproximadamente de un mes. Después de la operación puede presentar dolor abdominal, por lo que el médico encargado y especialista en cirugía debe recetar los medicamentos necesarios.
“Es una cirugía que duele tanto como una liposucción, pero se puede manejar con analgésicos y con la bomba del dolor, lo importante después, es hacerse los masajes, utilizar los aparatos para la recuperación, tener una dieta adecuada y utilizar la faja”, recomienda el cirujano plástico.
Se deberán usar soportes elásticos o faja, durante dos o tres semanas, así como evitar el entrenamiento físico que pueda provocar tensión durante cuatro o seis semanas, además de todos los cuidados en alimentación.