Escucha nuestras emisoras: 🔊 AUDIO EN VIVO |

Escucha nuestras emisoras: 🔈 BOGOTÁ 1430 AM | 🔈 CUNDINAMARCA 1580 AM | 🔈 TOLIMA 870 AM | 🔈 SOACHA | 🔈 NEIVA | 🔈 SOLO MÚSICA

Yo antes de ti, gracias por un final feliz

Por: Laura Alejandra Castañeda Angulo

Esta es la historia de Ariel, una perrita de raza Yorkie que había sufrido mucho maltrato durante toda su vida, era sometida a una explotación para que tuviera bebés cada vez que le llegaba el celo. En el criadero donde nació sólo recibió malos tratos, las condiciones en las que vivía eran muy precarias, no conocía verdaderamente lo que era amor, hasta que se encontró con Carolina, su mamá adoptiva actual.

- Patrocinado -

Un día como cualquier otro, aproximadamente a eso de las 10 de la mañana, Carolina iba caminando por el norte de la ciudad de Bogotá, por la localidad de Chapinero hacia el centro comercial El Retiro, ella había comenzado a seguir fundaciones porque quería adoptar una mascota, por esa zona había una fundación que siempre le llamó la atención, ella quería una perrita que le parecía divina y que estaba en silla de ruedas, desafortunadamente la tuvieron que dormir porque estaba en muy malas condiciones de salud. Carolina siguió buscando más información a través de redes sociales y, por medio de Instagram, aplicó a varios formularios de adopción, sin embargo, no fue un proceso fácil; un tiempo después empezó a seguir a la fundación “Ámanos Adopta” y se contactó con ellos, de inmediato le empezaron a contar la historia de un rescate que hicieron de unos perritos en un criadero.

La historia

El caso llegó a la fundación gracias a una persona a la que ellos le cuidan su mascota, ya que también cuentan con servicio de guardería. La señora les comentó que había una persona que tenía un criadero cerca al Tolima, en el centro-oeste del país, y que él estaba en ese momento regalando unos de los perros que tenían porque había muchos que estaban enfermos, viejos y otros habían nacido con condiciones diferentes.

La señora que les comentó el caso sobre el criadero logró ubicar algunos de los perros rescatados en diferentes hogares, sin embargo, decidió ponerse en contacto con la fundación ya que la persona iba a entregar más o menos 10 perros más y ella no podía hacerse cargo de todos. Fueron dos perros de color blanco raza West, una Pomerania y cuatro Yorkies, entre ellas Ariel y dos perros que también fueron devueltos porque tenían condiciones físicas diferentes, uno tenía el cráneo un poco más grande y el otro tenía un problema con su mandíbula y se le salía la lengua. La mayoría de ellos estaban en condiciones de deterioro, se llevaron a la veterinaria para revisarlos y sacar los exámenes para ver cómo estaban. Las personas de la fundación Ámanos Adopta, en su proceso de rescate y preparación, siempre llevan a las mascotas a sacar exámenes de sangre para tener certeza de qué enfermedad pueden llegar a tener, eso con el fin de evitar lamentos más adelante. Ese mismo día que llevaron a los perros a la veterinaria, les hicieron una revisión física y todos coincidieron con problemas de piel y los dientes llenos de sarro.

El dueño del criadero le contó a la conocida de la fundación que como algunos de los perros tenían condiciones diferentes, nadie los iba a comprar, por esa razón los estaba regalando. Astro y Nube tenían los conductos de sus oídos tapados totalmente de la inflamación tan avanzada de la otitis, básicamente no escuchaban nada. Astro no podía ver porque ya tenía cataratas, los otros perros, incluyendo a Ariel, tenían anemia, se encontraban bajos de peso y con alergia porque estaban llenos de pulgas, además de eso su comportamiento era estar caminando en círculos a toda hora, eso lo suelen presentar los perros cuando han sido privados de estar libres y han estado permanentemente en jaulas. En los criaderos nunca se preocupan por que los perros salgan al pasto ni mucho menos al aire libre, sino que, por el contrario, ellos hacen sus necesidades dentro de la jaula, comen ahí mismo y ahí también tienen a sus bebés, lo más cruel que hay para un animal.

Todos estaban en una condición muy deplorable, incluso peor que en comparación a los perros que la fundación rescataba de la calle, esto fue por culpa del nivel de explotación que se les hace y el abuso que sufren. El celo en una hembra es cada 6 meses, por lo tanto, cada que cumple su ciclo la ponen a tener bebés. Las hembras que llegaron a la fundación tenían sus tetillas gigantes y unas estaban con problemas de Piometra, una infección en el útero de cada vez que tienen a sus bebés en malas condiciones. Lo más complejo de todo el tema del criadero es la mezcla de razas, ya que por esa razón es que los perros nacen con condiciones diferentes a nivel de genética. La mezcla que hacen en los criaderos es la mamá con el hijo, la mamá con el hermano, entre hermanos, la hija con el papá, etc., por lo que la mayoría de los perros de raza tienen condiciones especiales, porque la genética se altera al combinarse entre parientes cercanos y entre razas no compatibles.

Carolina aplicó por la perrita llamada Nube, pero lamentablemente como lo cuenta la fundación, estaba muy enferma debido a las malas condiciones en las que vivió durante su estadía en el criadero, tenía muchos parásitos, anemia y se encontraba en muy mal estado, por esa razón le dijeron que mejor le daban a Ariel, que también venía del criadero, pero estaba un poco mejor que Nube. Le enviaron un formulario que debía completar para todo el proceso de adopción y también le solicitaron unos videos para conocer cómo era su casa, le hicieron preguntas sobre qué comida le daría y el presupuesto que iba a tener destinado para ella mensualmente, fue básicamente una serie de entrevistas previas para la aprobación.

Las personas de la fundación le dijeron a Carolina que entonces le iban a dar a Ariel y que se la iban a llevar hasta su casa; ella ya estaba mejor, lo único que faltaba era verificar el tema de las vacunas porque no sabían si las tenía completas o no, se supone que en el criadero se las habían colocado, sin embargo, debido a las malas condiciones en las que llegaron, no estaban muy seguros del tema. Estaban listos para programar la esterilización de Ariel, la cual se llevaría a cabo por la veterinaria con la que las personas de la fundación tienen convenio, se llama “Lovet” y queda ubicada en la calle 148 #16b-63, pero ya que a la perrita le llegó el celo en medio de todo el proceso de adopción, y estando en celo no se puede operar, era necesario esperar hasta que terminara su ciclo para evitar cualquier tipo de hemorragia.

La llegada

Con el paso de los días llegó el tan esperado momento, Carolina ya estaba lista para encontrarse con su nueva mascota, tenían estimado verse el domingo 17 de julio en las horas de la tarde, a eso de las 2:00 pm, todo estaba perfecto para su llegada, los nervios y la felicidad se podían presenciar. El momento pasó y ya estaban juntas, fue allí donde la fundación le comenzó a contar a Carolina y a su familia un poco más de la historia detrás de Ariel.

Tana, la persona encargada de llevar a Ariel hasta la casa de Carolina, les contó que la perrita venía de un criadero ubicado en el Tolima, departamento de Colombia. Les dijo -la van a notar con ciertos comportamientos algo diferentes-, entre ellos y el más notorio, caminar en círculos, eso debido a que estaba viviendo en un guacal básicamente todo el tiempo, hacía sus necesidades en el mismo guacal y también comía ahí mismo. Al inicio Carolina se dio cuenta que Ariel sólo caminaba en círculos y que a su vez temblaba muchísimo, no sabía cómo comportarse en un lugar abierto, mucho menos en una casa; poco a poco fue tomando confianza, pero igual se asustaba y se agachaba todo el tiempo hacia el piso cuando se le acercaba una persona, tampoco sabía subir y bajar escaleras, a Carolina le tocó enseñarle muchas cosas con bastante paciencia y mucho amor.

El comportamiento de caminar en círculos fue mejorando, el poder comer tranquila y también poder estar libre. En la fundación antes del encuentro con Carolina, tuvieron a todos los perros en una misma habitación, al principio no salían de los guacales; ellos le comentaron a Carolina que los tenían en dos guacales completamente abiertos para que se sintieran más cómodos y también para evitar ese choque tan grande en el cambio de sus hábitos, sin embargo, no salían de sus guacales así estuvieran con la puerta abierta. Con el paso de los días se dieron cuenta de que podían salir y poco a poco empezaron a mover su colita y a conocer lo que era una caricia.

No se sabía qué comida les daban porque venían todos con muchos parásitos, al inicio le tocó a Carolina intentar varias veces hasta que Ariel le recibiera algo que le gustara, poco a poco le mezclaba caldo de pollo sin sal con su concentrado para que comiera algo, incluso el veterinario que la acompañó durante este proceso le dijo que estaba pasando de “playa baja a playa alta”. Se comenzó a enfermar por todos estos cambios que estaba viviendo y ahí se dieron cuenta que tenía soltura, que hacía su excremento con sangre y al analizar las muestras, el resultado mostró que tenía “Giardia”, un parásito intestinal que causa graves trastornos.

El proceso

Carolina le empezó a tratar este parásito con diferentes medicamentos, con un poco de mala suerte, contagió a Thor, su otra mascota adoptada, por lo que también tuvo que ser atendido. Dentro de todo esto, como Ariel venía débil después del rescate, también le mandaron probióticos y un aceite para la rasquiña del pelo, ya que sufre de ansiedad, cuando algo le da miedo o le parece nuevo se comienza a rascar bastante.

En varias consultas con los veterinarios, todos han coincidido en que tuvo múltiples partos por el tamaño de las tetillas. La fundación le había dicho que Ariel tenía más o menos 3 años, pero luego de las consultas con los veterinarios, todos han llegado a la conclusión de que puede tener entre 5 y 6 años. Cuando le hicieron los exámenes, los veterinarios notaron que en sus tetillas existía una masa, la cual debía ser retirada por medio de una operación, pero primero tenían que determinar si la masa correspondía a algo benigno o maligno, sin embargo, todos los procesos que tiene pendientes serán realizados más adelante, ya los programaron para el día el 14 de septiembre.

En general Ariel se ha ido habituando poco a poco a su nueva realidad, le gusta dormir sola en su cama, al comienzo los ojos también los tenía muy mal, ella no estaba acostumbrada a la luz, ya que al haber vivido en un guacal todo el tiempo a oscuras, la dilatación con la luz le molestaba mucho, a Carolina le tocaba dormir con ella con la luz prendida, y poco a poco le fue cambiando la intensidad hasta que ya se acopló, incluso al comienzo le tocaba dejarle el televisor prendido con algo de ruido, luego irle apagando y así hasta que ya se acostumbró a su nueva vida.

Cada familia que ha adoptado a una mascota ha vivido un proceso diferente, al principio todo el mundo estaba encantado por tenerlos, pero se han dado cuenta de los problemas físicos y psicológicos con los que llega un perro de criadero, el cual ha vivido toda su vida encerrado, se dan cuenta en su caminar todavía en círculos, como fue el caso de Ariel, el hecho de hacer sus necesidades por todo lado mientras aprenden dónde es, el poder caminar tranquilos, el poder comer cuando quieran, por ejemplo, el que aprendieran a comer su concentrado también fue un proceso difícil, porque quién sabe ellos qué comían, se tardaron en acostumbrarse y saber que tenían su propia comida, el hecho de sentirse queridos, más adelante en confianza ya saben qué es que los consientan y que realmente se sienta amor por ellos.

Cada uno tiene un comportamiento diferente en su proceso. Ellos se adaptan bastante rápido a los cambios y más con el amor que los recibe su nueva familia, al final esa es la satisfacción de las fundaciones y de las personas que adoptan, el hecho de haber cambiado el destino de una vida que fue abusada de muchas maneras. Actualmente Carolina se encuentra feliz con Mighty, ese es el nuevo nombre de Ariel, viven juntas y enfrentan los procesos con calma pero, sobre todo, con mucho amor.

| Nota del editor *

Si usted tiene algo para decir sobre esta publicación, escriba un correo a: radio@uniminuto.edu

Otros contenidos

Contenidos populares