Hoy se llevó a cabo el juicio en el que se le imputaron cargos al fiscal de la Unidad de Investigación y Acusación de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) Carlos Julián Bermeo, al ex senador Luis Alberto Gil Castillo y otras tres personas capturadas el pasado viernes por presunto caso de corrupción.
Durante la audiencia, Bermeo afirmó haber influido en algunas decisiones de servidores públicos, con lo cual, hizo posible que la carta que envió la JEP a los Estados Unidos solicitando el material probatorio que relacionaría a Jesús Santrich con actividades de narcotráfico, nunca llegara a su destino y quedara represada en Panamá.
Sobre esto, recordemos que el Gobierno culpó a la empresa de mensajería 4-72 de la pérdida de la misiva.
De igual forma, el ex fiscal de la JEP, aseguró que sostuvo conversaciones con el secretario encargado de recibir los documentos de la entidad para retrasar por lo menos tres meses el proceso judicial de Zeuxis Pausias Hernández Solarte, alias Jesús Santrich.
“Incluso se habla de un magistrado con el cual miembros de esta organización delincuencial han estado reunidos y que, además, cuenta con un grupo grande de servidores que colaboran en esta empresa criminal”, afirmó el ente acusador.
La Fiscalía también aseguró que en la reunión que sostuvieron estas personas el mismo día de los hechos, hablaron sobre la entrega de al menos 120 kilos de droga a un hombre que la llevaría a Roma, Italia, para que se distribuyera en una discoteca de Toro.
Por tanto, a Gil Castillo y a Bermeo se les imputó el cargo de ‘concierto para delinquir’ por lo realizado con el proceso de Santrich y las negociaciones que se encontraban haciendo para llevar la droga a Europa.