Las historias del cine colombiano han dejado de a poco los estereotipos de los noventas, que fortalecieron las series dedicadas a retratar personajes que fueron populares por el dinero bañado con sangre. Estos personajes recurrentes desde el narcotráfico y la violencia han maltratado la visión del cine nacional.
Grandes desafíos se han propuesto directoras y directores que quieren percibir el cine nacional de manera diferente, y este es un buen ejemplo de ello. Colibrí es una historia de amor, de familia y de búsqueda de identidad en medio de los desafíos de la vida y no, no tiene tintes de telenovela, afortunadamente.
Ambientada en Bogotá, la película sigue la historia de una joven pareja milenial que enfrenta la realidad de convertirse en padres. El colibrí, un símbolo recurrente en la trama, representa el constante vaivén de la vida y la búsqueda de equilibrio en medio del cambio, como muchos dramas con estos temas cotidianos como eje.
Colibrí encuentra un tono serio y agradable, acorde a su narrativa y sin caer en excesos dramáticos y con un buen diseño de producción que, aunque convencional, es lo que pide la historia, ni más ni menos.
Este largometraje cuenta con un buen elenco colombiano liderado por Nathalie Rangel, Simón Elías, Eugenia Forteza y Alejandra Miranda, que, gracias al buen manejo de actores de parte de sus directores, los hermanos Salazar (Juanpedro Salazar y Francisco Salazar), le dan un buen ritmo a la película, que cuenta con buena técnica, y la agradable fotografía de José Silva.
Colibrí es una película de 99 minutos de metraje con química de parte de sus actores; buenas soluciones narrativas de los arcos de cada personaje, que, de manera agradable no caen en conclusiones complacientes para el espectador; más una historia que gana la atención de quien la vea.
Antes de llegar a las salas nacionales, Colibrí fue selección oficial de importantes festivales internacionales como Outfest Fusion, ImageOut Film Festival y Cinequest, Colibrí es una muestra de que el cine colombiano va para adelante y quiere seguir pensando diferente.