En 1954 fue asesinado Uriel Gutiérrez Restrepo, un estudiante de medicina de la Universidad Nacional en medio de una protesta que conmemoraba la muerte de Gonzalo Bravo Pérez, otro estudiante asesinado por la Policía en 1929. Desde ese entonces la represión ha sido una constante en la relación del Estado con el movimiento estudiantil.
Otro elemento común frente a estos casos ha sido la impunidad, pues los procesos judiciales han estado llenos de interrogantes sin respuesta y sin juzgar a los responsables.
Pese a estar en un Estado social de derecho se pensaría que las garantías y derechos de los ciudadanos serían respetados, pero los casos de Diego Felipe Becerra, Wilder Alvarado y Andres Camilo Ortiz demuestran lo contrario. Muchachos que por hacer arte callejero (grafitti), por vestir ancho o por expresarse de manera diferente fueron estigmatizados y criminalizados en su condición de jóvenes. En consecuencia asesinados por la policía. La constante se mantiene: no hay condenados.
Lo que es más preocupante es la confusa información que circula desde la Fiscalía General de la Nación y que se reproduce por los medios de comunicación refuerzando los discursos que caracterizan a los jóvenes populares como peligrosos y violentos.
Sin duda, quedan muchas reflexiones sobre el accionar de la Policía Nacional, pues queda demostrado que están violando derechos, como el debido proceso. Para profundizar sobre este tema nos acompañó en La Carreta de loma sur en el espacio de Voces en Movimiento Óscar Ramírez del Comité de Solidaridad de Presos Políticos, quien nos contó sobre el accionar de la policía en relación a los movimientos sociales.
Otro problema que señala Ramírez es la poca formación que tiene la policía en materia de Derechos Humanos y el uso de excesivo de la fuerza por parte de los agentes uniformados. Sin duda, el debate queda abierto pues con la llegada del nuevo código de policía el panorama no parece cambiar, por el contrario se observan más represión.
La producción de este capítulo estuvo a cargo de La Carreta Loma Sur, Colectivo desde Abajo, Sofía Bermúdez y Julio Vargas.